La Diputación no hizo un inventario sobre los bonos del 'ferry'

La comisión de investigación de las Juntas de Vizcaya sobre los bonos del ferry cerró ayer su trabajo hasta el próximo 9 de septiembre con la declaración de dos diputados forales actuales. El titular de Hacienda, José María Iruarrizaga, afirmó, tras las preguntas de los junteros, que no se realizó ningún inventario patrimonial. Una aseveración que, según las fuentes consultadas, sorprendió a varios miembros de la comisión, al tratarse de un valor tangible.

Este caso se centra en la desaparición de más de 35.000 bonos que en 1995 la Diputación de Vizcaya había comprado a P&O, la naviera que gestiona la línea del ferry Pride of Bilbao, y que fueron declarados ilegales por la Unión Europea al tratarse de una ayuda de Estado. Un juzgado obligó a ambas partes a devolverse las subvenciones y los bonos, pero la Diputación no pudo restituir 35.707 billetes, por los que tuvo que pagar a la empresa 9,7 millones.

Iruarrizaga agregó que, en cualquier caso, la responsabilidad del control de los bonos era del Departamento foral de Transportes. Sin embargo, los anteriores diputados de Transportes, José Félix Basozabal (1999-2003) y Eusebio Melero (2003-2007) han declarado en la comisión que no han tenido ninguna implicación. Basozabal afirmó que correspondía al área de Presidencia, entonces dirigida por el actual diputado general José Luis Bilbao, y Melero comentó que se despreocupó de este asunto al señalarle sus altos cargos que no afectaba a los presupuestos de su área.

En la sesión también participó el diputado de Acción Social y portavoz foral, Juan María Aburto, quien declaró que conocía este caso por los medios de comunicación y los comentarios en los consejos de gobierno.