El regreso de la diva del nuevo 'soul'
Era uno de los conciertos más esperados de una artista que se prodiga poco. Erykah Badu paseó ayer su estilo inconfundible por los Veranos de la Villa, en un concierto breve que comenzó con 50 minutos de retraso y que dejó a algunos de sus seguidores con un poso de insatisfacción. Ataviada con un sombrero tejano y un fular sobre sus hombros, rodeada de buenos músicos y de óptimas segundas voces, desgranó algunos temas de su último álbum, New Amerykah Part Two, publicado el pasado marzo. Se trata del quinto disco de la artista, que debutó en 1997 con el primero y que en 2000 lanzó el segundo. Hubo que esperar hasta 2003 para el tercer álbum. Después se sumió en un silencio de cinco años que rompió en 2008 con New Amerykah Part One.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.