Nueva campaña contra el aborto

¿Si protegemos al feto, quién protege a la mujer? Esta tendría que ser la pregunta que la sociedad debería hacerse antes de ponerse a opinar sobre el drama que representa el aborto. Enfrentarse a una decisión tan importante y que marca toda la vida de la mujer no puede ser juzgada ni rechazada por la sociedad, suficientemente duro es pasar este trance como para tener que superar múltiples trabas legales...

Parece ser que la derecha, influenciada por el ánimo intervencionista de la Iglesia de este país -que le gusta mucha la política- ha llevado la ley que regula el derecho a la mujer a decidir al Tribunal Constitucional. Otra vez van a las altas instancias judiciales para acotar las libertades de los ciudadanos, en este caso el de las mujeres, y lo hacen para que no logren alcanzar las complicidades de sus ideas y principios en forma de votos; ¿no se dan cuenta de que no ganan las elecciones porque sus ideas no son del siglo XXI?

Como mujer, me gustaría no sentirme criminalizada y utilizada con argumentos moralistas que no hacen otra cosa que agravar el padecimiento de la mujer.- María Victoria García Pérez. Santa Coloma de Gramenet, Barcelona.

Con motivo de la aprobación de la nueva ley del aborto, el presidente de Murcia, Ramón Luis Varcárcel, ha declarado que no va a cumplir la ley, por ahora, siendo posteriormente matizadas sus declaraciones en el sentido que no se cumplirá por motivos técnicos.

La solución planteada por el Gobierno de la Región de Murcia consiste en enviar a las mujeres que quieran abortar a otras comunidades, lo que recuerda a los tiempos en los que las españolas pudientes tenían que emigrar a Inglaterra para tan desagradable evento, retrocediendo varias décadas. La Real Academia define delincuente como aquel que incumple la ley, de modo que siendo rigurosos en la aplicación del diccionario nos gobiernan un grupo de delincuentes, comenzando por nuestro presidente.

Conviene reflexionar acerca de que el presidente Varcárcel piensa que no debemos cumplir una ley con la que no estamos de acuerdo desde un punto de vista moral o ético. Sin duda batasunos, anarquistas y otros colectivos estarán muy agradecidos a las palabras del máximo representante del Gobierno murciano. Israel Sancho Portero Murcia