La Seda se desploma en su regreso a Bolsa tras un año

La Seda regresó ayer al parqué justo un año y un mes desde que sus acciones fueron suspendidas de cotización y se dio un gran batacazo. Los títulos de la química catalana cerraron con una caída del 52,35% respecto de su último precio, 0,34 euros por acción, en una sesión de efervescente movimiento en la que, en un primer momento, llegaron a recular un 60%. La compañía valoró "positivamente" esta leve recuperación durante la jornada, y también el hecho de que se negociaran más de 40 millones de acciones en un día.

El desplome se explica por la desconfianza de los inversores con relación al futuro de la compañía. La Seda, que preside José Luis Morlanes, intenta enderezar un camino sembrado de números rojos y endeudamiento mediante una ampliación de capital de 300 millones y un plan de reestructuración (ventas de plantas y terrenos incluidos) sujeto a esa inyección de dinero. Pero el panorama no está despejado.

La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) advirtió el pasado viernes de que La Seda está abocada al concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos) si no logra suscribir la ampliación de capital, porque el plan de viabilidad quedará comprometido y la banca acreedora podría instar a que se declarara.

La banca ha aceptado capitalizar 150 millones de deuda. Aportaría, pues, la mitad de los 300 necesarios. Pero ese pacto solo vale si La Seda logra en efectivo otros 150 millones "de manera simultánea o previa". La compañía afirma que tiene ya 100 millones seguros: entrarán en el capital BA Vidro (65 millones), más Caixa Geral, Banco Estatal Portugués y EBN Banco. Así que, para llegar a 300 millones, solo le faltarían 50. Pero esa suscripción de acciones por 100 millones está condicionada a que de forma "simultánea o previa" La Seda reciba peticiones de suscripción por al menos 300 millones. Si la suscripción de la ampliación queda incompleta, los inversores que hubieran comprado derechos de suscripción preferente en la fase de negociación de los mismos "perderían el importe pagado", dice la CNMV.

La empresa subrayó ayer la mejora del Ebitda un 16% en el primer trimestre. Frente a los 66 millones en negativo de 2009, la previsión de Morlanes es que este año el Ebitda sea positivo entre 50 y 65 millones. La cotización de cierre fue de 0,162 euros por acción, y el precio de suscripción de la ampliación es de 0,10 euros, lo que ha airado a los accionistas minoritarios de la empresa que rechazan a los gestores.