209 embarazos en 2009
La tasa de éxito fue de un 38,4% el año pasado
El procedimiento para completar una fecundación in vitro (FIV) ha evolucionado mucho en los últimos 25 años. El actual responsable de la Unidad de Reproducción Humana del hospital de Cruces, Roberto Matorras, recalca la "simplificación" de la técnica. La FIV es un proceso que se desarrolla por fases. Primero se estimulan los ovarios. Después se recuperan los ovocitos, más tarde se hace la inseminación en el laboratorio y finalmente se transfieren los embriones al útero de la paciente.
Entre otros avances, "las pacientes antes debían quedar ingresadas un día para someterse a una laparoscopia a fin de obtener los ovocitos, mientras que ahora se realiza por vía transvaginal con una aguja en apenas una hora", explica Matorras.
Antes de la Ley 14/2006 de 26 de mayo se transferían un número elevado de pre-embriones con el fin garantizar una mayor tasa de éxito. Sin embargo, dicha norma limitó la transferencia a tres para evitar la proliferación de embarazos múltiples no deseados. Hace 25 años la tasa de éxito era del 20% y hoy ya se ha elevado al 38,4%. De esta forma, de los 546 ciclos que el equipo de Matorras practicó en 2009, 209 culminan en un embarazo. La edad media de la mujer que se somete a este tratamiento es de 36 años y el límite impuesto en la Sanidad Pública es de 40 años. Más allá de esa edad sólo puede someterse al tratamiento en clínicas privadas.
Cruces es el centro de referencia de toda la red pública vasca en tratamientos de reproducción asistida. Además, es el único en Euskadi que realiza fecundaciones in vitro. El hospital baracaldés fue también la primera institución pública donde se puso en funcionamiento un banco de semen en 1978.
Mientras, el Hospital Donostia, Txagorritxu y Galdakao desarrollan la inseminación artificial -consiste es la introducción del semen o esperma en la vagina de la mujer para lograr la fertilización, mientras que con la fecundación in vitro ésta se produce en un laboratorio y el embrión se implanta más tarde en el útero-.
La Unidad de Reproducción Humana, que en 2008 tuvo un presupuesto de 1.106.310 euros, otorga "mucha importancia a la investigación continua", asegura Matorras, y tiene en marcha varios trabajos. Por un lado, trata de averiguar hasta qué punto condiciona el estrés los resultados del tratamiento y "qué pintan" ciertos receptores de sustancias opiáceas en los óvulos. También atienden a pacientes con Sida -se hacen lavados de semen- en colaboración con el hospital de Galdakao y a la reproducción de parapléjicos.
Las cifras
- Desde que hace 25 años naciese el primer niño probeta en Cruces, la Unidad de Reproducción humana del centro ha practicado hasta el día de hoy 7.365 ciclos de fertilización in vitro. De estos han derivado 2.283 embarazos; 1.986 partos y 297 abortos, y han nacido 2424 niños.
- También han aumentado de forma significativa las familias dispuestas a someterse a la técnica. Si entre 1984 y 1986 se hicieron 43 ciclos, el año pasado fueron 546.
- El hospital además ha practicado 6.239 ciclos de inseminación conyugal y 2.924 con semen de donante. De ellos han resultado, respectivamente, 1.238 y 440 niños.
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