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Conil redobla la seguridad para aplicar la prohibición del 'botellón'

El gobierno municipal ordena multar con 300 euros al que beba en la calle

La Policía Local de Conil (Cádiz) y la Guardia Civil doblarán la seguridad durante este fin de semana en la localidad costera. Al refuerzo que conlleva el comienzo de la temporada turística se suma el aumento de agentes decidido entre el Ayuntamiento y la Subdelegación del Gobierno para hacer cumplir la novedosa medida de prohibir el consumo de alcohol en la calle. Esta normativa se aplica por primera vez desde ayer y obliga a cambiar los hábitos nocturnos de la provincia de Cádiz, ya que, hasta este año, Conil era el municipio de referencia para las concentraciones juveniles del verano.

El Consistorio de Conil, gobernado por IU, decidió hace dos semanas prohibir tajantemente el botellón en todo el término municipal. Esta iniciativa venía precedida de otra similar: la eliminación de las carpas, un recinto de discotecas junto a la playa, donde acudían miles de jóvenes venidos de todos los pueblos cercanos. El equipo de gobierno decidió retirar la concesión a estos establecimientos después que durante varios años fueran foco de incidentes y episodios violentos.

El municipio ha eliminado también la zona de carpas de la movida

"Estuvimos pensando dónde reubicar la movida. Mantuvimos reuniones con las asociaciones de vecinos y otros colectivos pero no pudimos llegar a ningún acuerdo. Así que decidimos prohibir el consumo de alcohol en la calle en todos sitios", se justifica el alcalde, Antonio Roldán. "Sé que es una decisión valiente y será firme", sostiene. Pero este plan antibotellón no ha convencido a todos. Algunos grupos de jóvenes y particulares han protagonizado algunas movilizaciones frente al Consistorio. "Han matado el verano de Conil", recogen algunos de sus lemas y pancartas.

Ayuntamiento y Subdelegación del Gobierno acordaron incrementar las medidas de seguridad para este fin de semana, en el que va a empezar a aplicarse la nueva ley por primera vez. Los agentes municipales tienen la orden de sancionar con 300 euros a los que sean sorprendidos bebiendo alcohol en la calle. La Guardia Civil también incrementará sus efectivos en localidades cercanas como Vejer, Caños de Meca (Barbate) o Tarifa, donde se sospecha que se repartirá gran parte de la juventud que solía acudir a las zonas de ocio nocturno de Conil.

Los colectivos que ya se han manifestado en contra de lo que llaman la "ley seca" protestan por que el Ayuntamiento ha suprimido los lugares de ocio nocturno sin haber ofrecido ninguna alternativa. La concejal de Seguridad, Pepa Amado, asegura que se podrá seguir disfrutando de los bares de la localidad sin sacar las bebidas a la calle. También ha anunciado que próximamente se habilitará otra zona de esparcimiento con actividades alternativas al alcohol.

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