Los colegios privados plantean a Educación cómo rebajar el sueldo a sus profesores

Las patronales de los colegios concertados de Euskadi se reunieron ayer en un gesto casi sin precedentes para plantarse ante la medida del Gobierno de reducir la financiación para los gastos de personal de los centros privados, igual que recortará los sueldos de los profesores de la red pública. La rebaja salarial figura en el proyecto de ley con las medidas de ajuste que se debatirá en breve en el Parlamento por el procedimiento de lectura única, lo que impedirá a los grupos presentar enmiendas.

Ante la posibilidad cierta de que la medida salga adelante, las cinco agrupaciones -Kristau Eskola, la Federación de Ikastolas, AICE-IZEA, Ikasgiltza y EIB- anunciaron que irán a los tribunales. Al teimpo, rclamaron al Ejecutivo que les facilite fórmulas para poder efectuar el recorte sin que ello les ponga en una "situación de ilegalidad", porque no podrán hacer frente al pago de los salarios.

El recorte del Gobierno afectará a 12.000 docentes de la red concertada

El recorte supone un callejón sin salida en términos legales. Entre las posibles opciones que tienen, los colegios privados desechan de entrada crear nuevas cuotas para que sean las familias de los alumnos las que amortigüen la medida. La Ley Orgánica de Educación (LOE) prohíbe esta medida, al estyablecer que tales cobros no se pueden realizar en la enseñanza obligatoria, aunque el Consejo Escolar de Euskadi ha criticado estas prácticas, la última vez en febrero pasado.

Hasta ahora, la única solución que plantea Educación pasa por renegociar el convenio de la enseñanza privada, que no puede reducirse legalmente, según un informe jurídico que las patronales han remitido al Ejecutivo. Educación analiza este informe, pero ya ha apuntado que el Gobierno no es competente para regular los salarios de los docentes de la red concertada.

José Luis Sukia, de la Federación de Ikastolas, defendió que "la única forma [de ahorrar] no es bajar los sueldos". Los salarios son más bajos que en la publica, pero "¿qué sindicato firmaría un convenio a la baja?", se preguntó Aitor Bilbao, de Kristau Eskola. CC OO anunció ya hace días que recurrirá la medida, que afectará a 12.000 docentes de 300 colegios.

La consejera de Educación, Isabel Celaá, abordó ayer la polémica en el Parlamento: "El único peligro que tiene nuestra escuela pública es la reticencia al cambio", dijo. Negó una vez más que se vayan a recortar las plantillas de profesores de la red pública en la enseñanza obligatoria. La peneuvista Arantza Aurrekoetxea cifró esa rebaja entre un 6% y el 8%.

Celaá aseguró que la primera propuesta de Relación de Puestos de Trabajo que su departamento envió a los centros se hallaba "incompleta", a falta de que los propios colegios presentasen sus alegaciones.