Louzán ficha a un grupo pagado por constructores de Tomiño

Calculadora en mano, el presidente de la Diputación y del PP de Pontevedra, Rafael Louzán, va aglutinando apoyos para llegar a las elecciones municipales de 2011 con opciones de ser reelegido. Ayer le tocó el turno a Tomiño con la firma de un pacto con Alternativa Tomiñesa, una formación que se escindió del PP antes de las elecciones de 2007 y que consiguió dos concejales. El "partido del ladrillo" -nombre por el que era conocido en la villa por sus vínculos con constructores- desaparece y sus dos ediles pasan al PP.

Tomiño tiene una importancia especial en los comicios del próximo año porque las variaciones en el censo pueden otorgar al partido judicial de Tui -del que Tomiño forma parte- un representante más en la Diputación. Louzán lo tiene presente y así lo señaló ayer en Pontevedra, tras rubricar el acuerdo con el candidato del PP, César Pérez Ares, y José Antonio Souto, de Alternativa Tomiñesa. "Estamos hablando de un partido que tiene en este momento 1.209 votos y representa al 15% del electorado", precisó.

"Es un acuerdo para que estas personas vuelvan a su espacio natural", señaló Louzán. Souto asintió. "Llevamos tiempo luchando para volver al PP [...] Las personas inteligentes suelen llegar a acuerdos", remachó.

Pérez Ares aseguró que su proyecto pasa por renovar el partido siguiendo el "modelo Feijóo", si bien él mismo fue concejal en Tomiño cuando el alcalde era todavía José Luis Fernández Lorenzo, que estuvo 24 años en el cargo.

El partido que ahora desaparece tuvo una aparición fulgurante en la política municipal. Patrocinado por el constructor Manuel Martínez Barros -en paradero desconocido tras desmantelar su empresa en enero de 2008 y dejar en la calle a 50 trabajadores-, su antiguo socio José Ozores Palomino o el empresario local Fernando Otero Vilariño, entre otros, Alternativa Tomiñesa desarrolló una potente campaña electoral que no dio los frutos esperados, y el BNG accedió a la alcaldía tras pactar con Centristas de Tomiño (CdT) y PSOE. Alternativa Tomiñesa ha mantenido durante la legislatura una actitud pasiva, según aseguran fuentes municipales, que cuentan que uno de sus concejales rara vez aparece por los plenos de la corporación.

Los ocho concejales con que contará el PP a partir de ahora siguen siendo insuficientes para dar un vuelco al gobierno local. Louzán insiste en sumar a su causa a CdT, la tercera fuerza con tres concejales. Lo tendrá difícil, toda vez que la formación se ha pronunciado claramente en contra de la unión, la última vez hace una semana en declaraciones de su presidente, José Carlos Vila, a Atlántico Diario. Louzán asegura, no obstante, que no promoverá más mociones de censura en la provincia.

El anuncio de la absorción del PP no coge desprevenida a alcaldesa, Sandra González (BNG). "Vuelven a unirse quienes eran los mismos. A los únicos a los que puede sorprender es a los votantes de Alternativa Tomiñesa, después de que en el partido repitiesen por activa y por pasiva que no se iban a unir al PP", cuenta.

Tras Tomiño, Louzán sigue con su plan. El siguiente paso es hacer las paces con Miguel Ángel Capón Rey, de Acción Tudense. Después, un objetivo probable son los centristas de Nigrán. "Estamos trabajando en ese sentido", admitió ayer.