_
_
_
_
9. ENERGÍA. VENTA DE CO2 | La sostenibilidad del Estado de bienestar

La industria se pilla los dedos en la bolsa del CO2

Empresas españolas venden baratos sus derechos de emisión y se obligan a recomprarlos caros tras la crisis

En 2004, PriceWaterhouseCoopers predijo fugas de empresas entre 2008 y 2012 debido al Protocolo de Kioto, que iba a costar 19.213 millones de euros a la economía española. Seis años después, la industria española no protesta por el CO2. La industria pesada, gran receptora de los derechos de emisión que dio gratis el Gobierno, se ha dedicado a venderlo y a hacer caja. Masivamente en 2008 pero también en 2009. Esto, que ha sido "una ayuda, un bastón en tiempos de crisis", en palabras de un cargo de Industria, puede tener un reverso crudo a la salida de la recesión: para poner las fábricas en marcha muchas empresas deberán recomprar derechos. Y será, según las previsiones, a un precio mucho mayor.

La secretaria de Estado de Cambio Climático, Teresa Ribera, admite que la venta masiva de derechos por parte de la industria española "es un tema que puede llegar a ser preocupante". Kepa Solaun, director de Factor CO2, un intermediario, resume la situación: "La industria está vendiendo masivamente y en España puede faltar CO2 los próximos años. La venta ha sido beneficiosa para hacer caja pero a más largo plazo puede que el negocio no sea tan redondo. El CO2 no es algo de tesorería sino de una materia prima. Estas operaciones son pan para hoy y hambre para mañana".

La tonelada ronda los 16 euros y las previsiones apuntan a que en 2012 subirán hasta los 25 euros (el nivel que alcanzó en verano de 2008, antes de la caída de producción industrial), según Ismael Romeo, director general de Sendeco2, otro intermediario.

Cuantificar el fenómeno es complicado, porque las operaciones de compraventa son confidenciales. Pero tomando como referencia un precio de 12 euros el año pasado, el sobrante acumulado por la industria española es de 171 millones de euros en derechos de emisión, menos que los 400 millones del año anterior. Puede que no vendieran todo y que los más previsores, o menos acuciados, guardaran para el futuro, pero en general han imperado las ventas.

"Dile a alguien que está a punto de cerrar que piense en dentro de tres años. La venta de CO2 ha permitido a empresas afectadas por la crisis seguir abiertas, así que sin este mercado el problema sería mayor", opina Romeo. Eso, y que en otros casos la cuenta de resultados a final de año ha pesado más que la estrategia a medio plazo.

Aunque hay operaciones con cobertura -al vender te garantizas que el precio de recompra no suba demasiado-, lo "que impera es venta al portador", según Solaun. Para limitar el riesgo se necesita un aval y los bancos son remisos a apoyar estas operaciones. Compran fondos de inversión y eléctricas, principalmente.

Entre 2005 y 2007, los derechos de emisión entregados se agotaban al acabar el plazo. Bruselas asignó demasiados derechos a la industria, sobró y se hundió el mercado. Para no repetir el problema, en el periodo 2008-2012, los derechos entregados gratis no caducan, se podrán seguir usando a partir de 2013, cuando saldrán a subasta y no habrá asignación gratuita. Entonces subirá el precio. Y mucho más si la UE decide ampliar el recorte de emisiones desde el 20% actual al 30%.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_