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Un grupo americano queda como única opción para reflotar Ramón Vizcaíno

La salvación de la firma guipuzcoana pasa por una inyección multimillonaria

Mikel Ormazabal

Un grupo inversor estadounidense figura en este momento como la única opción que le queda al fabricante de equipos de frío industrial Ramón Vizcaíno para salvar su crítica situación financiera y garantizar la viabilidad del negocio. Los principales socios de la firma guipuzcoana y el Gobierno vasco quieren dilucidar antes de acabar este mes si aceptan las condiciones, aún desconocidas en su detalle, que planteará la empresa americana con la finalidad de sacar a flote una empresa de algo más de 400 empleados -la mitad de ellos en la planta principal de Oiartzun- y unas deudas que rondan los 50 millones de euros.

Ramón Vizcaíno afronta ahora la fase crucial para su refundación. Tras haber logrado apaciguar recientemente una guerra fratricida que enfrentaba a sus socios, la compañía guipuzcoana podría sacar adelante si prosperan los contactos que se han iniciado con el mencionado grupo americano. Se trata de una compañía que tiene "bastante experiencia" en reflotar empresas, alguna de las cuales en España, que se encuentran al borde de la quiebra, según explicaron fuentes cercanas a la operación. Inicialmente, un grupo venezolano también mostró interés en tomar el control de Ramón Vizcaíno, pero finalmente esta opción ha quedado prácticamente desechada por su "escasa fiabilidad", aseguran las mismas fuentes.

El grupo inversor tiene experiencia en rescatar empresas en quiebra

La llegada del grupo americano puede ser el último salvavidas para Ramón Vizcaíno, después de que fracasara, en abril pasado, el intento apadrinado por el Gobierno vasco -tiene el 16,3% del capital- para salvar la compañía. El Departamento de Industria, muy implicado en asegurar la viabilidad de la empresa guipuzcoana, convenció a los empresarios José Luis Arregui, presidente de la papelera Ence, e Iñaki López Gandásegui, presidente de Aernnova, para tomar las riendas de una nave que iba a la deriva. Esta operación se fue al traste cuando había un enfrentamiento visceral entre los tres socios mayoritarios, familiares entre sí: por un lado, los hermanos José María y José Ramón Vizcaíno, con el 33% del capital, y sus dos tíos Jesús Gómez Montoya, con el 21%, y Antonio Pérez Nievas, con un 14%.

La situación se normalizó la semana pasada cuando los principales socios acordaron que Gómez Montoya y José Ramón Vizcaíno (tío y sobrino) asumieran la presidencia del grupo guipuzcoano, en sustitución de Juan Carlos López Zalduendo, quien presentó su dimisión ante los accionistas.

Rebajada la crispación interna, Ramón Vizcaíno, que ha sido beneficiaria de cuantiosas ayudas públicas en los últimos tiempos, necesita ahora la entrada de capital externo para asegurar su continuidad. Dos informes encargados por Industria a sendas consultoras calcularon en unos 35 millones la cantidad que necesita la compañía de Oiartzun para mantener su actividad comercial. No está asegurado que el nuevo inversor inyecta esa cifra económica, ni que la entrada del grupo extranjero en el accionariado evite un proceso concursal.

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En todo caso, la oferta del grupo americano será analizada por la Sociedad de Gestión de Capital Riesgo (dependiente de Industria) y, en última instancia, debería refrendarse por la junta de accionistas de Ramón Vizcaíno.

68 años de historia

- La empresa: Ramón Vizcaíno se fundó en 1942. Se dedica a desarrollar sistemas de refrigeración industrial y de tratamiento de aire para procesos industriales y agroalimentarios. José Ramón Vizcaíno y Jesús Gómez Montoya asumieron la presidencia desde la semana pasada tras varios años de crisis interna.

- Plantilla: Cuenta con unos 420 trabajadores, de los cuales 200 están empleados en la planta de Oiartzun y el resto, en 26 delegaciones repartidas por el resto de España y en Sudamérica y África.

- Resultados: Acumula unas deudas que rondan los 50 millones de euros. Se desconocen las pérdidas durante el pasado ejercicio. La Kutxa es su principal acreedor con 27 millones.

- Ayudas: La firma guipuzcoana ha recibido 76 millones de las instituciones públicas. El Gobierno vasco, con una participación del 16,3% en el accionariado, le ha aportado 11 millones.

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Sobre la firma

Mikel Ormazabal
Corresponsal de EL PAÍS en el País Vasco, tarea que viene desempeñando durante los últimos 25 años. Se ocupa de la información sobre la actualidad política, económica y cultural vasca. Se licenció en Periodismo por la Universidad de Navarra en 1988. Comenzó su carrera profesional en Radiocadena Española y el diario Deia. Vive en San Sebastián.

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