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Blasco da marcha atrás en la querella contra Alarte por acusar a Camps

La reprobación a Luna no se ha tramitado porque no tuvo el quórum necesario

Dieciocho días después de haber anunciado una querella del PP contra el secretario general de los socialistas valencianos, Jorge Alarte, "por lanzar falsas y graves acusaciones para manchar el honor y el buen nombre del partido", y solo seis días después de que el juez Antonio Pedreira atribuyera a Francisco Camps, su Gobierno y el PP valenciano hasta siete posibles delitos, Rafael Blasco, portavoz popular en las Cortes y consejero de Solidaridad y Ciudadanía, consideró ayer que tal querella "no debería presentarse".

El 13 de mayo, el líder del PSPV-PSOE arremetió contra las excusas del presidente de la Generalitat, Francisco Camps, para aferrarse al cargo tras la decisión del Tribunal Supremo que le conducía a ser juzgado por los trajes que le regaló la trama del caso Gürtel y dijo: "Camps no se vendió por cuatro trajes. Es cierto, nadie se lo cree. Fue por más de 30 millones en contratos con la trama Gürtel". Si aquel día le parecía a Blasco que Alarte seguía con sus manifestaciones "la estela de Ángel Luna", portavoz parlamentario del PSPV-PSOE, a quien los populares se disponían a reprobar en las Cortes, y acusaba a los socialistas de estar "en un bucle en el que creen que pueden arrasar con todo", ahora le parece que "sería una postura muy torpe por parte del PP darle la más mínima importancia al señor Alarte", porque las encuestas le auguran malos resultados.

Blasco abogó ayer por dejar a Alarte "lo más tranquilo posible" en respuesta a una pregunta expresa sobre la conveniencia o no de retirar la querella una vez que el propio juez Pedreira abundó en lo que había denunciado el dirigente socialista de que, detrás del caso de los trajes, está el amaño de contratos de la Generalitat con la trama Gürtel y la supuesta financiación ilegal del PP.

Por otra parte, dentro de la política del PP de presión sobre los socialistas para contrarrestar sus críticas a la corrupción política, el PP votó hace dos semanas la reprobación del portavoz parlamentario Ángel Luna. Todos los grupos de la oposición abandonaron la Cámara en solidaridad con el portavoz socialista y la propuesta solo fue votada por 48 diputados populares. El propio Luna reveló ayer que no se le ha comunicado la reprobación (cuyo efecto práctico, de todas maneras, es nulo) porque la votación no obtuvo el quórum necesario, que exige la participación de la mayoría de los 99 parlamentarios de las Cortes.

RTVV, a la sombra de un sumario

"Aunque tarde, no ha tenido más remedio que caer del burro", exclamó ayer el portavoz parlamentario socialista, Ángel Luna, al comentar la decisión del director general de Ràdio Televisió Valenciana (RTVV), José López Jaraba, de destituir al secretario general del ente Vicente Sanz, acusado de acoso sexual por tres trabajadoras de la cadena pública. La destitución se produjo el pasado viernes, más de tres meses después de que estallara el escándalo, y los socialistas habían advertido de la posibilidad de que Sanz, que estaba apartado del puesto, sin sueldo, a petición propia, aprovechara que no le habían abierto expediente para jubilarse con una jugosa indemnización. Ahora, López Jaraba le ha abierto un expediente disciplinario que quedará a expensas de lo que decida la juez que instruye la denuncia de las tres empleadas de Canal 9.

Luna advirtió, sin embargo, sobre Juan Prefaci, el sustituto de Sanz, y lamentó que la secretaría general de RTVV "esté en manos de una persona que en estos momentos está bajo la acción de un sumario judicial". El portavoz socialista en las Cortes Valencianas recordó que Prefaci fue jefe de gabinete de Pedro García, ex director general del ente público que dimitió tras hacerse públicas las irregularidades en la adjudicación de la sonorización e instalación de pantallas para la visita del Papa a Valencia en 2006, un contrato del que se aprovechó la trama de corrupción de caso Gürtel. "Este señor fue miembro de la mesa de contratación que propuso la adjudicación de todos los contratos con motivo de la visita del Papa", señaló Luna, que añadió que no le extrañaría que terminara "declarando como imputado" en un asunto que sigue investigando el juez del Tribunal Superior de Justicia de Madrid Antonio Pedreira.

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