Los artistas abren sus estudios

Los artistas y artesanos de los barrios de Ciutat Vella, Gràcia y Sarrià-Sant Gervasi abren las puertas de sus estudios al público en las decimoséptimas jornadas de Tallers Oberts, que se celebran este fin de semana y el próximo en Barcelona. "Nuestro objetivo es que cada vez más distritos de Barcelona se sumen a la propuesta y no hacernos la competencia entre nosotros", explica Silvia Rosés, coordinadora de la iniciativa. Sin embargo, la idea no ha gustado a algunos artistas de Sarrià, que desde 2003 venía organizando su propia actividad a través de la Asociación de Artistas Visuales del barrio. En Sarrià los talleres son visitables sólo hasta hoy.

La pintora y grabadora Montse Samarra asegura que no abre su estudio con la intención de vender, sino por "solidaridad". "Me ilusiona integrarme en el colectivo y ver los talleres de la zona al descubierto". Junto al suyo, en la plaza de Sant Vicenç de Sarrià, Teresa Mas de Roda ha sacado el coche del garaje para dejar sitio a su colección fotográfica. "Soy cocinera y me he cansado de trabajar 15 horas en un restaurante", explica, rodeada de imágenes captadas en sus viajes "por medio mundo", quien quiere recuperar su vocación artística después de haber estudiado diseño gráfico.

Jordi Simó es ceramista desde hace 10 años. Anteriormente era profesor de literatura, pero una hemiplejía le dejó paralítico del lado izquierdo en el año 2000 y desde entonces no puede hablar. La pintura y la cerámica se han convertido en su medio de expresión. Por voluntad propia, en cambio, Selma Leal, bióloga de formación, decidió sustituir la ciencia por la joyería artística. "Todas las piezas que creo son únicas. Hay tantas ideas en mi cabeza que no tengo tiempo de repetirlas", declara mientras abre un armario donde guarda plumas, bellotas, hojas secas..., que son la fuente de su inspiración.

Las lenguas y las tipografías son las musas de los grabados sobre madera y linóleo de Valeria Blancaforte. Cristina Olivé se ha puesto su delantal para reparar un mueble ante los visitantes. La restauradora comparte taller en Ciutat Vella con Rafael Marín, encuadernador de libros antiguos; Alfonso Fernández, acuarelista, y Maite Consuegra, diseñadora de joyas medicinales. "Hay una piedra para cada dolencia y para cada persona", explica.