Tanto resentimiento
Anonadado, desde muy lejos y aguardando un milagro en esta crónica para una muerte anunciada, me permito respetuosamente hacerle algunas preguntas a los ciudadanos de España. Está claro que los magistrados que tienen en sus manos la suerte del juez son franquistas, del Partido Popular, tal vez falangistas.
Pero me pregunto: ¿no podría ser que hubiera entre ellos algún terrorista, algún etarra quizás, algún narco, algún militar argentino o un chileno pariente de Pinochet o algún socio encubierto de Correa en el caso Gürtel? Pues concluyo que solo así se explicaría tanto resentimiento, tanto odio visceral hacia un hombre que ha mostrado las tres virtudes esenciales de un juez, esto es: objetividad, coraje y sentido de la responsabilidad.
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