La Audiencia niega al Guggenheim el derecho a una rectificación

El Museo Guggenheim Bilbao no ha conseguido que la revista Vanity Fair publique su respuesta al reportaje Las cloacas del Guggenheim, publicado en el número de la misma de diciembre de 2008 con información sobre el desfalco cometido por su ex director financiero, Roberto Cearsolo, y las irregularidades apreciadas en las operaciones de adquisición de obras de arte. La Audiencia de Vizcaya ha ratificado el fallo que en primera instancia negó al museo el derecho de rectificación.

La sentencia precisa que, salvo dos errores referidos a las cifras del desfalco y a considerar a un juntero popular miembro de la comisión investigadora del Parlamento, la rectificación exigida por el Guggenheim excede del ámbito de protección de dicho derecho porque contiene "valoraciones, opiniones o conclusiones" sobre el contenido del reportaje y no correcciones a hechos inexactos.

La pinacoteca se plantea presentar una demanda de defensa del honor

Contra el fallo de la Audiencia vizcaína no cabe recurso. Fuentes del Guggenheim señalaron ayer que sus abogados estudian la presentación de otra demanda de defensa del honor y la propia imagen.

El Guggenheim recurrió el fallo inicial que rechazó su exigencia de rectificación alegando que el derecho a la misma no consiste en que el medio de comunicación se retracte, sino que "se permita a la persona aludida dar su opinión o su versión" de los hechos. El recurso entendía que la inclusión de juicios de valor y opiniones personales en la rectificación no debe acarrear la desestimación de la demanda por "la gravedad de las acusaciones y su amplia difusión".

El tribunal tampoco aceptó la publicación del escrito una vez eliminados los juicios de valor sobre el reportaje, muy crítico con la gestión de la pinacoteca. La rectificación parcial no fue admitida porque la totalidad del texto, señala la sentencia, "contiene valoraciones subjetivas".