"¡Pégate a la banda, saca centros y juega!"

Manuel Pellegrini miró de reojo la banda en el minuto 83: sólo quedaban Diarra y Juanfran preparándose. El partido iba empatado (2-2) y en el campo estaban Benzema, Higuaín y Cristiano Ronaldo. Los tres intentaban remontar y no dejar escapar la Liga. Faltaba un cuarto delantero. Sabía el técnico chileno que no tenía más opciones. Así que llamó a Juanfran, el punta de 22 años del Castilla que anoche estaba escondido detrás de Diarra, pero que hace dos semanas marcó un golazo con el filial desde el centro del terreno. El delantero se ha entrenado a menudo con el primer equipo y ya había sido convocado tres veces: Getafe, Almería y Valencia.

"En ese momento seguro que Pellegrini habrá pensado que había que dar la vuelta al partido, pero no me lo dijo. Me pidió que me pegase a la línea de banda, que sacase centros y paredes y que jugase", recordó Juanfran antes de marcharse a casa con sus padres. No quiso ir a celebrarlo. "Es que mañana tengo entrenamiento con el Castilla a las 9.30 y hay que terminar la temporada de la forma más digna", comentó. En su entorno dicen que no hay persona más humilde que él. "Es rápido y tiene desborde", le define Miguel Pardeza. "Me gusta pegarme a la línea de banda y desde allí encarar", añade él. Debutó justo en el Día de la Madre. "No le compré nada porque tenía esperanza de que iba a debutar y mejor regalo que este no hay", dijo.

Juanfran es el tercer canterano que debuta con Pellegrini. Lo hicieron Mosquera en Getafe y Marcos Alonso en Santander. "Para los que dicen que el mister no cuenta con la cantera, aquí está la prueba. Me sacó en el momento más difícil, cuando la Liga se podía ir, y es una muestra de confianza", resaltó Juanfran. Falló un par de centros, pero mantuvo la posesión cuando Osasuna apretaba, defendió varias pelotas y se ganó una falta que Guti mandó por encima del larguero. "Pensaba que me iban a sacar con el resultado a favor y, cuando vi que Osasuna metió el primero, dije: 'Bueno, ya estamos'. Antes del partido le había dicho al Pipa que marcase dos goles rápidamente porque quería jugar. Así que con la ventaja de ellos empecé a repetirme: 'Madre mía".

El delantero del Castilla ya había debutado en Primera con el Getafe de Michael Laudrup. "En la Liga, la Copa y la UEFA", matiza. Con 16 años hizo una prueba para el juvenil del Madrid y no la superó. Recaló en el Getafe y el año pasado se marchó seis meses al Villarreal B. Hasta julio, cuando recibió la llamada del Madrid. "Míchel le quería. Me llamó diciéndome que no podía prometer nada, pero que deseaba que hiciese la pretemporada con él y que, si demostraba que valía, le subiría al primer equipo", cuenta su representante, José Miguel González. Optó por el Madrid. "Luchaba desde pequeño para esto y estoy contento de haber devuelto a mis padres su esfuerzo conmigo", concluyó Juanfran.