El regidor de Coslada denuncia que la Comunidad ha olvidado a su municipio

El alcalde de Coslada, Ángel Viveros (PSOE), pidió ayer para su municipio el mismo trato que reciben otras localidades por parte del Gobierno regional y de la presidenta, Esperanza Aguirre, durante el encuentro digital mantenido ayer con los lectores de EL PAÍS. También aseguró que su peor día al frente del Consistorio cosladeño fue el 8 de mayo de 2008, cuando se destapó un supuesto caso de corrupción dentro de la Policía Local y de su entonces jefe, Ginés Jiménez.

Viveros repasó los asuntos que el Gobierno regional tiene pendientes con Coslada: el acceso desde la M-45 al municipio, la reforma de la avenida de San Pablo, la construcción de un colegio público en el barrio del Puerto, el colector del barrio de Santiago y la puesta en marcha del plan regional de inversiones Prisma 2008-2011. Además, el "retraso injustificado" en la aprobación definitiva de las obras de construcción de El Corte Inglés. "Estos ejemplos sirven para juzgar si Esperanza Aguirre tiene el mismo comportamiento con Coslada que con el municipio vecino de Torrejón de Ardoz", añadió el regidor.

Algunas preguntas se centraron en la Operación Bloque y la supuesta red de corrupción dentro de la Policía Local. Viveros adelantó que a partir de septiembre habrá un nuevo jefe de la policía, que está ahora en la academia. También se ha reestructurado la plantilla, se han creado plazas de mandos intermedios (cabos y sargentos) y se ha modernizado el cuerpo. "Seguimos trabajando para que los policías locales sean servidores públicos y nos garanticen la seguridad", añadió el alcalde.

El regidor criticó que seis familiares del anterior alcalde, Raúl López Vaquero (PP), consiguieran pisos protegidos en el barrio del Puerto. Este asunto está siendo investigado por un juzgado de Coslada.