Una bici blanca para Matías

Cuando un ciclista muere es costumbre que sus compañeros le recuerden colocando una bicicleta blanca en el lugar del accidente. Más de 200 personas sobre ruedas homenajearon así ayer a Matías, el chico de 17 años que la semana pasada murió arrollado por un coche en la avenida de Andalucía. "Es una llamada de atención sobre la fragilidad de nuestros cuerpos y la violencia de los coches", explica Christel, habitual del movimiento ciclista Bici Crítica que cada último jueves de mes recorre el centro de la ciudad para reivindicar el uso de sus vehículos frente al de los coches.

Los ocho grados que marcaba el termómetro no favorecían la convocatoria, pero aun así un par de centenares de ciclistas impusieron sus ruedas sobre los motores. "Es curioso que se nos acuse de atascar la ciudad un solo día al mes, cuando está así siempre por los coches", se queja Miguel Andrés. Los participantes en la marcha comparten razones para decantarse por la bicicleta: está el ahorro de tiempo. "Con la bici sales de casa y ya estás de camino. Ni atascos, ni aglomeraciones en el metro", dice Rocío de Torre. La económica fue la que esgrimió Nacho cuando su abono joven dejó de servirle, "no tenía dinero", dice, además de la ecológica. Lo que reclaman es seguridad y más carriles ciclistas. Y que dejen de mirarles como si siempre molestaran.