Iberdrola dejará a ACS entrar en el Consejo y luego pedirá su cese inmediato

Iberdrola comunicó ayer a través de una nota de prensa que ACS "podrá designar a un miembro en el Consejo de Administración de Iberdrola" en la junta que la eléctrica celebrará este viernes. ¿Han hecho las paces los presidentes de la eléctrica, Ignacio Sánchez Galán, y de la constructora, Florentino Pérez? Nada más lejos. En la misma nota, Iberdrola subraya que ambas compañías son "competidoras en numerosos mercados" y que la eléctrica "respetará, en todo caso, la voluntad de sus accionistas". Tras esas palabras se esconde la voluntad de que la junta vote el cese inmediato del representante de ACS por ser un competidor.

En su nota, Iberdrola señala que Residencial Monte Carmelo, filial de ACS, ha solicitado la designación de un consejero por el sistema de representación proporcional en la próxima junta de accionistas, agrupando para ello un 6,67% del capital. La ley de sociedades anónimas permite nombrar un consejero cuando se tenga un porcentaje de capital igual o superior al que resulte de dividir el 100% por el número de consejeros, en este caso 15.

La junta tendrá que decidir si veta a la constructora por ser competidor

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Por ello, "en cumplimiento de la legalidad vigente", dice Iberdrola, "se dará curso a la solicitud" de ACS. Eso sí, "previo ejercicio en forma del sistema de representación proporcional", con lo que se abre una puerta a evitar el nombramiento si queda algún resquicio formal para hacerlo.

En todo caso, la ley de sociedades anónimas también prevé, en su artículo 132, que "los administradores que lo fueren de otra sociedad competidora y las personas que bajo cualquier forma tengan intereses opuestos a los de la sociedad cesarán en su cargo a petición de cualquier socio y por acuerdo de la junta general".

Ese artículo -y los propios estatutos de la eléctrica- son los que, previsiblemente, se esgrimirán en la junta para pedir el cese inmediato del representante de ACS. Con ello, se repetiría una operación como la entrada fugaz de tres representantes de Acciona en el Consejo de FCC en la junta de junio de 2004.

Para preparar el terreno, Iberdrola señaló ayer que su Consejo de Administración ha solicitado diversos informes económicos y dictámenes jurídicos sobre la existencia de un conflicto de competencia entre ACS e Iberdrola. La eléctrica asegura que "estos informes y dictámenes, así como las respectivas presentaciones de resultados correspondientes al ejercicio 2009, evidencian que ambas compañías son competidores reales en numerosos mercados y han rivalizado en licitaciones nacionales e internacionales para la prestación de servicios y la realización de proyectos". "La competencia es particularmente intensa en diversas áreas estratégicas de Iberdrola, extendiéndose, entre otras, a la producción de energía, una de las principales áreas de negocio de Iberdrola", añade la nota.

Fuentes cercanas a la constructora señalan que hay otros consejeros con intereses en el sector de la energía, aunque desde la eléctrica consideran que el solapamiento en esos casos es marginal. En todo caso, será la junta la que decida este viernes. Ahí las de ganar las tiene Sánchez Galán, que contará con un buen número de delegaciones de voto. La eléctrica ha hecho campaña pidiendo delegaciones y publicitando la prima de asistencia a la junta. ACS también ha intentado recabar apoyos y se reserva su estrategia jurídica.

En paralelo, la Comisión de Economía del Congreso votará hoy la enmienda socialista que propone anular las limitaciones a los derechos de voto en las empresas y que afecta a Iberdrola, con un límite del 10%. CiU ha anunciado que la apoyará si se limita a las empresas cotizadas y se pospone su entrada en vigor a 2011. Parece probable que el PSOE admita esos puntos.