Guardiola: "Ya está entre los elegidos"

A Pep Guardiola no le gusta que le hablen de la messidependencia. Pero no es tan osado como para despreciar el tremendo peso que La Pulga tiene en el fútbol del Barça: "Messi es tan bueno que es imposible que no tenga tanta repercusión en el juego. Jugamos para que él entre mucho en acción. El día que no esté, con este espíritu, no tendremos su brillantez, pero responderemos. Sabemos que con Messi somos mejores, pero el día que no esté habrá otros. Su papel lo asumirán otros y saldremos adelante".

Parece un discurso de autoconvencimiento. Pues el técnico, como tantos otros, sabe que habrá muy pocos como él en la historia del fútbol. ¿Ha pasado Messi a estar entre los elegidos?, le preguntaron. "Ya hace tiempo que Messi está entre los elegidos. A su edad, no hay quien haga lo que hace él", respondió. "¡Qué más puedo decir!", exclamó Guardiola, que parecía haberse quedado sin adjetivos. ¿Cuándo se atreverá a darle descanso si ni con un flemón ha asumido no ser titular? "Quiere jugar hasta contra la Leonesa. Ama su trabajo, su deporte. Para mí, es difícil dejarle fuera en este estado", apuntó Guardiola.

Después de la tradicional felicitación a su equipo, que preside la práctica totalidad de sus conferencias de prensa pospartido, y de la ya casi tan habitual oda al fútbol de Messi, Guardiola encontró tiempo para hablar de otros asuntos. Como del partido en sí mismo. "Ha sido de hombres, muy exigente". Luego, resaltó especialmente el esfuerzo de los suyos porque jugaban contra "un equipo muy agresivo, con una muy buena dinámica y mucha agresividad arriba"; contra "muy buenos jugadores, que han exigido mucho". Con todo y eso, también encontró un pero: "Lástima de que se nos haya complicado con esos dos goles".

La desesperación de Ibrahimovic ante sus problemas para reencontrarse con el gol también centró parte de la conferencia. Messi e Ibra fueron la cara y la cruz de la velada. "Le he hecho ver que estamos encantados con su partido. Los goles ya llegarán". Según el técnico, el sueco volvió a ser anoche el de septiembre, octubre y noviembre. "Después de las vacaciones [navideñas] le ha costado mucho entrar. Pero hoy le he vuelto a ver lo que nos dio a principio de temporada. El matiz del gol es lo menos importante".

Sus compañeros también se volcaron con Ibrahimovic. El primero, Messi, que le cedió el balón para que convirtiera el penalti que él había provocado. "Le estábamos ayudando de todas las maneras para que volviera a sentir ese gustito de marcar un gol", reconoció más tarde Alves.

Guardiola se queda sin adjetivos para Messi