Griñán acelera los cambios y nombra portavoz a Mario Jiménez
El presidente hará hoy la crisis de Gobierno, en el que entra Álvarez de la Chica
El secretario general del PSOE andaluz y presidente de la Junta, José Antonio Griñán, tiene decidido hacer hoy crisis de Gobierno, según confirmaron ayer a EL PAÍS varias fuentes sociaistas que daban por segura la entrada en el Ejecutivo del granadino Francisco Álvarez de la Chica. Después del congreso extraordinario en el que ha cambiado por completo al núcleo duro de la dirección, el líder socialista empezó ayer a mover fichas, al trascender que hoy propondrá al pleno de la comisión de la ejecutiva regional a Mario Jiménez como nuevo portavoz parlamentario.
Jiménez (1971) es secretario general del PSOE de Huelva y sustituirá a Manuel Gracia en el cargo. Gracia, que es diputado andaluz desde la primera legislatiura, iniciada en 1982, accedió a la portavocía del grupo parlamentario en septiembre de 2004 y fue pieza clave en la reforma del Estatuto de Autonomía, proceso en que el que contribuyó junto con otros a crear un clima de complicidad con Izquierda Unida para sacar adelante la nueva redacción.
El nuevo portavoz seguirá como secretario general del PSOE de Huelva
El cambio implicará una reducción de consejerías
No obstante, su continuidad en el cargo estaba en entredicho desde que Griñán fue elegido presidente de la Junta de Andalucía hace ahora casi un año. Con un Partido Popular crecido desde que la bancada popular la pilota Javier Arenas, eran muchos los que creían necesario un viraje en la dirección del grupo socialista con un portavoz con un perfil más correoso, hábil en el cuerpo a cuerpo y exigente con sus diputados, aptitudes que atribuyen a Jiménez los que le conocen. Al igual que el vicesecretario general del PSOE, Rafael Velasco, y la secretaria regional de Organización, Susana Díaz, Jiménez es de la escuela de Juventudes Socialistas, donde fue responsable de de Organización.
Diputado autonómico desde 2000, Mario Jiménez no va a abandonar la secretaría general del PSOE de Huelva, según fuentes de la dirección andaluza. Su nombramiento como portavoz tiene que ser propuesto por la ejecutiva regional y luego ratificado por el grupo parlamentario. Su estreno como portavoz será en el pleno del 7 y 8 de abril. Ya en esa sesión se sentará justo detrás del presidente de la Junta en la nueva distribución de escaños.
La otra gran incógnita que queda por despejar es la composición del nuevo Ejecutivo que, según varias fuentes, comunicará hoy a la dirección socialista. La ejecutiva fue convocada a mediodía del pasado viernes, aunque al cierre de esta edición aún no había remite oficial a los medios de comunicación, en contra de lo habitual. Tampoco es normal la hora de la reunión, las seis de la tarde. Es la tercera pieza del puzle que le queda por mover a Griñán una vez que desde el pasado 13 de marzo tiene en sus manos todo el control del PSOE para hacer y deshacer.
Unas declaraciones de Velasco ayer, en un acto en Sevilla con la consejera de Economía y Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, sobre el acuerdo de la deuda histórica fueron interpretadas por algunos como el anuncio del cambio inminente de Gobierno. Preguntado sobre la crisis contestó: "No está en el orden del día, pero se abordará si lo estima el secretario general".
Al contrario que cuando cambió a su Gobierno tras sustituir a Manuel Chaves en la jefatura del Gobierno andaluz, Griñán está llevando todo este proceso como mucho "hermetismo", palabra que utilizaron varias personas. En la ocasión anterior, él mismo no tuvo inconveniente en contar con cierta publicidad con qué consejeros iba a contar. "Pese a que es muy transparente, esta vez lo está llevando de manera muy personal", aseguraba una persona de su entorno.
Varias fuentes socialistas daban por hecho la salida de la presidenta del PSOE, Rosa Torres, de la Consejería de Cultura y de Juan Espadas de la de Vivienda y Ordenación del Territorio, departamentos que quedarían subsumidos en otros. E igualmente, eran varios los que aseguraban la entrada en el Gobierno del vicepresidente primero del Parlamento andaluz y secretario general del PSOE de Granada, Francisco Álvarez de la Chica, una de las personas junto con Mario Jiménez y Rafael Velasco, en la que Griñan se ha apoyado en la preparación del congreso del PSOE.
La entrada de De la Chica abrió las especulaciones sobre una posible salida de la consejera de Justicia y Administración Pública, Begoña Álvarez, tanto por su procedencia territorial (ambos son de Granada) como por una posible reducción de la estructura del Gobierno. Algunas fuentes también apuntaban hacia una remodelación del área económica, en el que el actual consejero de la Presidencia, Antonio Ávila, tendría un cometido principal. Mar Moreno y De la Chica eran los nombres más citados para ocupar el hueco de Presidencia.
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