Tripartito y CiU se unen para rechazar la instalación del cementerio nuclear en Ascó

Las esperanzas del Ayuntamiento de Ascó (Ribera d'Ebre) de albergar un almacén temporal centralizado (ATC) de residuos nucleares sufrieron ayer un serio varapalo. El Parlament aprobó una moción para rechazar la instalación del silo nuclear en Cataluña, con los votos del tripartito (PSC, ERC e ICV-EUiA) y de CiU. El PP y Ciutadans se abstuvieron. La resolución, que no es vinculante, afecta gravemente a la candidatura de Ascó, la única catalana en liza. El ministro de Industria, Miguel Sebastián, ya avanzó en febrero que la localidad elegida para albergar el silo será la que garantice "el máximo consenso".

"Perderemos todas las oportunidades de acoger el almacén. Y después, ¿qué?", soltó el convergente Rafael Vidal, alcalde de Ascó, antes de la decisión apoyada por los votos de su propio partido. Ayer, el rechazo al ATC desairó al edil, que entiende que la votación trasquila sin motivo las aspiraciones económicas del municipio. Ello pese a que lleva semanas preparándose para encajar el golpe. El Ayuntamiento intensificó desde febrero los contactos con los alcaldes de la comarca para negociar el reparto de los beneficios del almacén nuclear, unos seis millones de euros al año sin contar la inversión inicial.

Vidal entiende que el Parlament presiona al Gobierno central, responsable de una decisión que debería concretarse en junio, meses antes de los comicios autonómicos catalanes. El alcalde teme que el ambiente electoralista se lleve por delante el ATC. Tiene sus motivos: el presidente de la Generalitat, José Montilla, y el líder de CiU, Artur Mas, le dejaron hacer en 2008, pero se han opuesto ahora, en plena precampaña. CiU incluso le ha abierto un expediente informativo por ofrecerse para acoger el almacén. El consorcio pretende ser la figura que contrarreste el acoso del Parlament a Industria. Se sumó en su apoyo el Consejo de Cámaras de Comercio de Cataluña, que pidió un debate "sereno y preciso" sobre el ATC.

El Parlament ya aprobó en 2008 una moción similar, aunque sin el apoyo de los socialistas. Hasta ayer, el PSC había sido condescendiente con el cementerio nuclear que impulsó Montilla en su etapa como ministro de Industria.