Secuestrado un pesquero keniano con patrón español
El Gobierno alega que la liberación del barco no es su responsabilidad
El buque palangrero Sakoba, con bandera de Kenia y patrón español, fue secuestrado en la madrugada del lunes a 400 millas (740 kilómetros) al este de Dar Es Salam (Tanzania), según informó ayer la fuerza europea de lucha contra la piratería (Eunavfor). Ayer, el pesquero navegaba hacia el puerto somalí de Haradere, donde ya estuvo secuestrado el año pasado durante 47 días el atunero vasco Alakrana.
Pero a diferencia de lo sucedido entonces, no se reunió el Gabinete de Crisis en La Moncloa ni tampoco acudió a la zona la fragata Navarra, que navega por el Índico. "La liberación del barco no es competencia del Gobierno español", indicó un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, "otra cosa es que se activen los servicios consulares, en la medida en que está implicado un ciudadano español".
El capitán es un español de origen portugués y con residencia en Vigo
La comercializadora desmiente que el 'Sakoba' se dedicara a la pesca ilegal
"Cuando hay un ciudadano español [secuestrado] nos movilizamos igual, sea uno 15 o 16", dijo el ministro Miguel Ángel Moratinos, quien habló con el embajador español en Nairobi y experto en secuestros, Nicolás Martín-Cinto. Ayer por la tarde aún no se había conseguido contactar con la familia del patrón, que tiene nacionalidad española, aunque es de origen portugués, y residencia en Vigo. Los otros 16 tripulantes del barco, dedicado a la captura del pez espada, son africanos, a excepción del maquinista, que es polaco.
Aunque Eunavfor indicó inicialmente que el armador era español, la empresa Sakald Pesca, SL, con sede en Vigo, difundió un comunicado en el que matizaba que se encarga de comercializar las capturas del Sakoba, pero que éste pertenece a la compañía East Africa Deep Fishing, con sede y puerto base en Monbasa (Kenia). Para complicarlo más, otras fuentes indicaron que el buque, que tuvo en el pasado bandera española, figura a nombre de la sociedad Shimco Limited, con sede en Ghana.
En el mismo comunicado, la comercializadora gallega rechazó que el Sakoba se dedicara a la pesca ilegal y aseguró que éste iba dotado de un sistema de localización por satélite VMS -que reportaba a las autoridades kenianas-, disponía de licencia para faenar en aguas de Tanzania y autorización para exportar sus capturas a la UE. El administrador único de Sakald es José González González, un antiguo socio de la cooperativa de armadores de Vigo que hace unos años "se dio de baja y abanderó barcos en el extranjero", según fuentes de la cooperativa.
A diferencia de los atuneros, la flota palangrera carece de agentes privados de seguridad. España abandera de 227 buques de este tipo, de los que el 90% tienen su puerto base en Galicia y más de 70 disponen de licencia para faenar en el Índico, donde los piratas somalíes protagonizaron la semana pasada cuatro ataques frustrados contra buques españoles, una vez concluida la temporada de los monzones. El Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino subrayó que el Sakoba "no es español a ningún efecto", mientras que fuentes militares advirtieron que ni siquiera se podría realizar una operación de abordaje del barco sin permiso de Kenia.
Fuentes de Eunavfor indicaron que los piratas podrían haber capturado el Sakoba para utilizarlo como buque nodriza en otros ataques. "Es muy común en el secuestro de barcos pequeños", indicaron. De la misma opinión es Andrew Mwangura, director del Departamento de Ayuda al Navegante, informa Natalia Junquera. "Hemos intentado contactar con el barco todo el día, pero ha sido imposible. Los piratas han destruido el teléfono para evitar ser localizados", añadió.
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