Uno de los denunciantes es socio en el proyecto

El mundo empresarial da pie a veces a situaciones enrevesadas, como ocurre en el proyecto de la fábrica de Magallón. En una de las sociedades implicadas, Habidite Zaragoza, el 8% de las acciones pertenece a Miguel Aguirre, quien es uno de los siete socios de Fernández que le denunciaron por supuestos delitos fiscal, societario y de apropiación indebida a consecuencia del impago de una deuda fiscal cifrada en 43 millones de euros.

Aguirre, al igual que otros denunciantes, cobró en el reparto de ese dinero -que el dueño de Afer ha justificado para sanear su grupo y comprar acciones que fortaleciesen a Habidite- por las acciones que tenía su empresa Bost-H 96 en la sociedad Habidite Alonsotegui. En concreto, recibió 3,5 millones. Sin embargo, según consta en el informe de los administradores concursales de Iurbenor (la empresa que pidió el aplazamiento por el impago de los 43 millones de IVA), adelantado el sábado pasado por EL PAÍS, Aguirre trasladó esta inversión a Habidite Zaragoza, para pasar de "un proyecto actualmente paralizado a un proyecto con mayor grado de desarrollo y expectativa de viabilidad".

Miguel Aguirre posee el 8% de las acciones de Habidite Zaragoza

En la investigación del Juzgado de Instrucción número 6 de Bilbao sobre la denuncia de los socios contra Jabyer Fernández, Aguirre realiza una declaración, fechada el pasado 20 de mayo, en la que se muestra favorable a devolver este dinero. "El dinero percibido podía haber sido o podía ser entendido como ilegalmente dispuesto, por lo que para evitarse problemas [Miguel Aguirre] entendía que la retroacción [la devolución] era lo más conveniente", señala textualmente el informe de los administradores concursales.

No fue el único, ya que el yerno de Aguirre, Diego Gutiérrez (otros de los denunciantes de Fernández), también recibió 1,5 millones por vender acciones de su empresa Entrinnova y dedicó el dinero a obtener participaciones de Habidite Zaragoza. Pero en este caso luego hubo un canje con el dueño del grupo Afer, con lo que ahora el accionariado de Habidite y sus filiales está en manos de Fernández y sus familiares, salvo el 8% de esas acciones en poder de Miguel Aguirre.