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Entrevista:

El conflicto de los fotógrafos según sus protagonistas

AUMENTE: Dimisión

Señor Aumente, ¿por qué dimitió usted de su cargo de presidente de la Agrupación Nacional de Fotógrafos representativos y de todos sus demás cargos sindicales?Manuel Aumente. He dimitido sabiendo que si yo no lo hago más de la mitad de la profesión, y sobre todo cualitativamente la más importante, hubieran estado de mi lado. Ello implicaría convertirme en una bandera que produciría una irreparable escisión en la agrupación. Precisamente para facilitar esa unidad me marché.

La segunda razón para mi dimisión ha sido que no me parecía ético que el presidente de una agrupación ejerciera acción judicial contra personas que representa legalmente. Estas acciones judiciales han sido planteadas por injurias y diversos actos de violencia, entre los que detaca, el incendio, provocado, de mis oficinas, en cuyas paredes aparecieron diversas pintadas alusivas a mi actividad empresarial.

EL PAIS. El grupo de fotógrafos que iniciaron la campaña para que usted y la directiva de la agrupación dimitiera ofrecía, como uno de sus principales argumentos, el que su empresa, Difo, se había asociado con la empresa Tecnotrón, para lograr la exclusiva de la confección de un posible nuevo DNI. ¿Cuál era su papel en este proyecto?

M. A. Mi empresa nunca se asoció con Tecnotrón. Esta empresa pretendía presentar un proyecto para confeccionar este nuevo carnet de identidad en caso de que el Gobierno convocara algún día el concurso oportuno. Para poder presentar este proyecto necesitaba ofrecer unas instalaciones que solamente tendrían sentido en caso de lograr la concesión. Es por ello por lo que Tecnotrón propuso a la empresa Difo la posibilidad de disponer de nuestras instalaciones para tal proyecto.

EL PAIS. Sin embargo, de llevarse acabo esta concesión, ¿no se perjudicarían los intereses de los profesionales, sobre todo teniendo en cuenta que las fotos serían en color?

M. A. No; pero lo que el fotógrafo español no se puede permitir es la pereza mental. Las máquinas automáticas se están extendiendo en las fotografías de identificación. Algunos han creído, o mejor dicho, han temido que estas máquinas supusiesen una competencia irresistible. Sin embargo, en el mercado ya se pueden adquirir laboratorios de procesado de fotografías de carnet en color que ocupan apenas un metro cúbico, cuestan unas 300.000 pesetas y realizan el trabajo en pocos minutos. En este asunto del DNI se ha creado, intencionadamente, un gran confusionismo no informando con claridad. Tecnotrón pretendía lograr la confección de las tarjertas, pero no de las fotografías del DNI.

EL PAIS. Entonces, ¿por qué estas acusaciones de perseguir el monopolio de las fotografías del DNI?

M. A. En medio de toda la demagogia que se ha hecho con el asunto de las máquinas autemáticas, de lo que se trataba era de desvestir a un santo para vestir a otro. El grupo que promovió este conflicto tiene un afán de. protagonismo y unos intereses que han creído podrían defender mejor por la vía de los cargos, directivos de la Agrupación que en una competencia al margen del sindicato.

EL PAIS. ¿Qué intereses?

M. A. Los principales miembros de este grupo que tan fuertemente ha atacado a la junta directiva recién dimitida, están asociados en una empresa, Profoto, que persigue unos intereses idénticos a los de mi empresa, Difo. Este detalle podría aclarar muchas cosas, ya que hasta el momento de la fundación de Profoto, el 12 de junio de 1975, no había ningún tipo de enemistad.

EL PAIS. También se le ataca por sus «exclusivas» fotográficas en diversos centros de reunión pública.

M. A. La palabra exclusiva no es demasiado correcta por lo que conlleva de monopolio cuandode lo que se trata es de una concesión que se somete a la competencia de las distintas empresas fotográficas. Por suerte o por desgracia España está en la órbita del mundo capitalista y las empresas fotográficas se desenvuelven en este sistema. En casi todos los grandes centros, hoteles o lugares de reunión del mundo, la actividad fotográfica está controlada, por distintos motivos, como pueden ser la seguridad o el orden. En el caso de las iglesias han sido los mismos fotógrafos los causantes de la tendencia a la concesión, ya que su comportamiento ha sido escandaloso en numerosas ocasiones.

GARATTONE: Las multinacionales

EL PAIS. Usted y su empresa han sido acusados de perseguir el monopolio de las fotografías para camets de identificación. ¿Hasta qué punto perjudican sus máquinas electrónicas a los fotógrafos?Garattone. La empresa que dirijo ha sido creada y opera de conformidad a la legislación vigente, y la actividad que está desarrollando es del todo legal y además de interés directo para toda la población.

Los precios a que nosotros vendemos las fotografías, aun siendo módicos, no perjudican a los fotógrafos y en todo caso son las tarifas establecidas por la Comisión de Precios de las Agrupaciones de Fotógrafos.

Quiero recalcar que nosotros no pretendemos ninguna exclusiva. Las acusaciones de que Tecnotrón pretendía monopolizar el mercado de la fotografía son totalmente falsas. Un pequeño grupo de fotógrafos, con sus patrañas y acciones desleales, trata de sembrar un descontento entre los profesionales con los cuales hemos vivido hasta ahora en buena armonía, logrando que dimitiera la junta directiva de la Agrupación Nacional. Es necesario que las autoridades y el público sepan del carácter monopolista hacia el cual tiende este pequeño grupo con el objetivo final de eliminar una libre competencia y crear ellos un monopolio para poder poner condiciones, precio y lesionar al público adquirente y al programa del Gobierno, que trata de mantener, dentro de lo razonable, el valor del poder adquisitivo.

Este pequeno grupo, en fin, nos acusa de acciones que- están practicando ellos mismos. Por otro lado, en España desarrollan actividades empresariales de este tipo otras seis casas, al menos, o sea, que Tecnotrón es una más de las empresas dedicadas al negocio de las máquinas autómaticas de fotografía.

EL PAIS. Sin embargo, el hecho de que las fotos de los nuevos camets tengan que ser en color les daría mucha ventaja respecto a los profesionales.

G. Hemos previsto este detalle, y la prueba de nuestra buena voluntad para que el fotógrafo no se vea perjudicado por el avance de la técnica es que hemos puesto a su disposición un foto-estudio para fotos de carnet en color rápido.

EL PAIS. Se ha dicho que fotógrafos que han recibido sus estudios tienen serios problemas, ya que las máquinas de la calle, producen las tiras de cuatro fotos en color a 75 pesetas, cifra que ellos tienen que elevar bastante para que el estudio lés sea rentable. ¿Es cierto?

G. Tecnotrón combate la inflación aumentando la producción. Al fotógrafo le sale la tira según el consumo y según que el estudio lo tenga alquilado o en propiedad. Si la fotografía del estudio es algo más cara que la de la máquina automática de la calle, es lógico, ya que en el primero interviene un operario.

EL PAIS. Tecnotrón ha sido acusada de instalar sus máquinas en el mismo portal de los estudios de los fotógrafos. ¿Cómo explica usted esta agresividad empresarial?

G. Que yo sepa, se ha tratado de un caso y se ha debido a un error de la oficina comercial. Estamos en contacto con el perjudicado para reparar el daño lo antes posible.

NEBOT: Acusador

José Manuel Nebot. Al abandonar la reunión en la que la junta directiva fue obligada a dimitir, el señor Garattoni dijo: «Ahora voy a invadir de máquinas toda España.»Los profesionales no estamos contra la mecanización de la fotografía, porque ésta puede suponer un abaratamiento del producto. Luchamos contra estas empresas porque persiguen un monopolio del mercado nacional. Con ello no sóIo perjudican a los 9.000 fotógrafos que viven de esta profesión, sino también a nuestra economía, ya que los beneficios van a parar a grandes multinacionales extranjeras.

Tecnotrón perseguía con su proyecto del DNI obtener, asociados con la empresa Difo, la concesión en exclusiva de la confección de la tarjeta del DNI, pero en ese proyecto también se preveía instalar sus fotomatones en las comisarías y demás lugares donde se expiden los carnets de identidad. Incluso tenían previsto acompañar a los funcionarios de la DGS, en unidades móviles que recorrieran distintos pueblos, para fotografiar instantáneamente a las personas que tuvieran que hacer su DNI. ¿No es esto querer monopolizar un mercado?

EL PAIS. Al público lo que le interesa, sin embargo, es el abaratamiento de sus fotografías...

J. M. N. Precisamente por eso propugnamos que no se modifique el actual sisterna de DNI. Si fueran en color, las fotos serían más caras.

EL PAIS. Las máquinas las hacen a 75 peselas la tira de cuatro.

J. M. N. En estos momentos las máquinas automáticas de color hacen dumping, y la opinión pública debe saber que si algún día logran desbancar a los fotógrafos, las multinacionales podrán elevar y elevarán los precios lo que les dé la gana.

EL PAIS. Usted y su grupo lucharon hasta legrar la dimisión de la junta directiva. ¿Por qué?

J. M. N. Es inadmisible que el presidente y el tesorero de una agrupación sindical se intenten asociar para un negocio, que perjudicaría a todos sus representados. Pero nuestras acusaciones de corrupción se extienden a prácticamente todos los ex miembros de la junta directiva porque entre ellos se repartieron la mayoría de las exclusivas que existen en nuestro país, exclusivas que coartan la libertad tanto de los fotógrafos como la de los clientes. Esto unido a otros factores que ya expusimos en anteriores ocasiones.

EL PAIS. ¿Qué perspectivas ofrece la profesión de fotógrafo?

J. M. N. El fotógrafo se ha convertido en un asalariado de los grandes laboratorios. El 98% de los profesionales de la fotografía sufren todas las desventajas del empresario: impuestos, riesgos, etcétera y todas las desventajas del trabajador que es lo que realmente es. Su misión es impresionar negativos para los grandes laboratorios de procesado. Esto no puede ser así. El fotógrafo debe unirse y crear cooperativas a nivel regional que le permitan controlar y beneficiarse de todo el proceso de su trabajo.

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