La UE aborda los últimos flecos de las 'vacaciones fiscales'

Un total de 45 minutos dieron para mucho en la reunión mantenida ayer en la Comisión Europea en Bruselas por el comisario de la Competencia, Joaquín Almunia, con los consejeros de Economía y de Industria, Carlos Aguirre y Bernabé Unda, respectivamente, a los que acompañaban el secretario general del Gobierno vasco, Manuel Salinero, y el secretario de Acción Exterior, Guillermo Echenique.

Dieron para hablar "del cierre del año económico a nivel europeo, del frenazo de la economía alemana, de la política general comunitaria para competir en un escenario cada vez más protagonizado por las economías china y estadounidense y del Pacto de Estabilidad que, sin duda, afecta al déficit excesivo de España y que, por tanto, nos afecta también a nosotros", afirmó el consejero de Economía al término de la reunión.

Aguirre y Unda se reunieron 45 minutos con el comisario Almunia

También hubo un asunto propio entre los tratados con el comisario europeo: las vacaciones fiscales que concedieron las diputaciones y que Europa declaró ilegales en 1999. En 2001, la Comisión exigió a las empresas que devolviesen las ayudas recibidas y la mayoría ya ha cumplido.

"Las negociaciones van por buen camino", señaló Aguirre. "La gran mayoría de las empresas afectadas ya han devuelto los incentivos. Quedan cuatro o cinco casos por resolver en este asunto". Almunia les transmitió que la Comisión está estudiando el "gran volumen de información" que se le ha enviado, pero "el asunto va bien", recalcó. "Quedan por ver dónde están los pequeños puntos de fricción, para poderlos arreglar", añadió.

Unda también introdujo la cuestión de la energía en la agenda de la reunión. "Hemos hablado de nuestra apuesta clara por el coche eléctrico", aunque no de otros temas que competen más a la comisión de Industria que al área que gobierna Joaquín Almunia, "pero que son de gran importancia para nuestro país".

Ante el encuentro de hoy con el Anderlecht, el fútbol fue el último territorio explorado -aunque en el dintel de la puerta- entre dos aficionados rojiblancos reconocidos y habituales de San Mamés cuando el trabajo lo permite, como Joaquín Almunia y Carlos Aguirre.