Xunta y Estado movilizan ayudas para arreglar un millar de viviendas

Hasta un millar de viviendas que superan el medio siglo de existencia podrán ser rehabilitadas con los acuerdos firmados ayer por el Ministerio de Vivienda y la Xunta y que movilizarán, incluyendo la aportación de los particulares, casi 30 millones de euros. Las administraciones estatal, gallega y local suscribieron ayer estos convenios para 43 áreas declaradas de rehabilitación integral en una treintena de municipios de la comunidad. Por primera vez, se ampliará a casas del rural situadas en el Camino Francés a Santiago las líneas de ayudas destinadas esencialmente a viviendas situadas en cascos históricos o barrios urbanos de cierta antigüedad.

Los responsables de ocho ayuntamientos de A Coruña, diez de Lugo, seis de Ourense y otros tantos de Pontevedra acudieron ayer a firmar estos convenios con la ministra de Vivienda, Beatriz Corredor -que aporta el 40% del gasto, 7,3 millones-, y el conselleiro de Medio Ambiente, Agustín Hernández, cuyo departamento invertirá 6,3 millones.

Este nuevo programa de subvenciones, que se prolongará hasta 2012, prevé que los propietarios de viviendas situadas en una área de rehabilitación pueden obtener hasta el 75% de la inversión necesaria para remozar sus residencias, con un límite de 11.600 euros. También podrán pedir préstamos a condiciones preferentes para hacer frente a las obras.

La rehabilitación ofrece numerosas ventajas, entre ellas la de permitir a los vecinos "permanecer en su barrio de siempre", destacó Corredor, y además genera mayor número de puestos de trabajo que la construcción de nuevas edificaciones, así como una mano de obra más cualificada. La renovación de viviendas junto a programas de alquiler y la vivienda protegida son "el eje de un sector inmobiliario más equilibrado y sostenible", incidió la ministra al destacar las prioridades de su departamento para permitir el acceso a una vivienda "de calidad a precios asequibles".

Tras la firma de estos 44 convenios, la ministra se desplazó hasta el barrio coruñés de Labañou para visitar las obras emprendidas hace tres años y casi terminadas para remozar el conjunto de seis edificios de Virxe do Carme, una urbanización de 271 viviendas de propiedad municipal construidas en 1950 que se ha beneficiado de estos programas.