Ellas llegan castigadoras
Las diseñadoras muestran su 'savoir-faire' en la última jornada de la Semana de la Moda de Valencia
La moda es así. Ya, ya sabemos que generalizar es malo. No hacerlo es tedioso. La moda es ese terreno movedizo donde lo novedoso es ley de aplicación inmediata. Y es que las tendencias, y los nombres propios, van a tropecientos por hora. ¡Ándale, ándale! Ya no tenemos moda, sino recuerdos de moda. Y así, llegamos a la última jornada de la Semana de la Moda de Valencia un poco mareados, y bastante desorientados, ante lo ecléctico de las propuestas.
Bueno. Datos. Del sartorialista al casual, de lo conceptual hasta lo ampliamente confuso. ¡Glups! Pero una cosa sí que ha quedado bastante clara: Juan Vidal o José Zambrano son algunas de las evidencias de que la moda valenciana vive en constante proceso de relevo generacional. Los nombres de siempre mantienen su estatus o van perdiendo relevancia, y hay que ir dejando paso a los nuevos talentos y sus nuevas maneras.
El último desfile en Feria Valencia prometía 'show' y no defraudó
Al tema. El diseñador vasco Ion Fiz fue, inexplicablemente, el más madrugador. Merecería otro horario. Técnicamente diestro, sobriamente intuitivo y en contacto con la realidad, Ion Fiz, combina el diseño relajado con cierto gusto por el clasicismo evolucionado. Fiz, en Aprés Midi, marca las siluetas y las contrasta con apuntes masculinos. Las texturas vaporosas y semitransparentes comparten protagonismo con la lana y la alpaca. El resultado es una colección elegante, concisa y muy femenina.
Yiyí Gutz presentó una colección inquietante. Un trabajo ensimismado, de factura correcta y comercial. Noelia Navarro, con Enigmática, se volcó en la ausencia de color. El total black aparece con efectos volumétricos, en diferentes texturas pero con movimiento. La diseñadora Tonuca termina un ciclo vital, se lo pide "el cuerpo y la mente". Diez años lidiando con las fieras de la moda es muy agotador. Y para celebrarlo va y monta el circo. En la puesta en escena de la diseñadora hubo mucho de demostración de fuerza conceptual. Una emotiva presentación que rememoraba más a Carnivale (HBO) que a Freaks de Tod Browing. Prendas en tejidos povera en rojo, magenta y blanco combinadas con tricot en negro.
El último desfile de la Semana de la Moda de Valencia prometía show y no defraudó. Y aparece la dominatrix. Maya Hansen azota las témporas del steampunk con sus corsés desestructurados de ir a liarla, sus pantalones para montar, sus románticas, pero también lúbricas polainas y otros fetiches para practicar la sexomaquia. Guau. El personal aúlla ante tanta Caperucita encorsetada. Menos lobos, que aquí estamos por los príncipes de Gales, terciopelos y tafetanes. El recital finaliza. ¡Sniff, sniff!
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