Velickovic ya ejerce de Bullock

Ya ejerce, y el ya no es gratuito. Viene a cuento porque Velickovic acaba de cumplir 23 años, pero es capaz de actuar con el temple y la capacidad de liderazgo que muchos jamás serán capaces de alcanzar. El ala-pívot serbio del Madrid, en una situación difícil, ante un rival de entidad como el Unicaja pese a su inestabilidad de esta temporada, tomó el mando de las operaciones y arrastró a la tropa de Messina.

El Madrid había dominado, pero, concluido el tercer cuarto, el Unicaja cogió el hilo al juego y se puso por delante: 50-51. Sonaban las alarmas en Vistalegre. Y Bullock, lesionado en el banquillo, movía la cabeza con gestos de desaprobación por el cariz de los acontecimientos. Era el momento para los valientes de verdad. Velickovic lo fue. Nueve de sus 18 puntos y cinco de sus ocho rebotes los consiguió entonces, en ese último cuarto, cuando más lo necesitaba el Madrid, cuando las muñecas tiemblan y las mentes se nublan. Eso les sucedió a varios jugadores del Unicaja, que en cinco minutos entró en coma sin que nadie lo remediara (84-67 fue el resultado tras el abrumador 34-16 del último cuarto). Sus jugadores exteriores fallaron, empezando por Juan Dixon (cinco pérdidas y uno de seis en triples) y sólo fue sostenido por dos interiores, Freeland y Archibald, difícilmente referentes para el equipo. En esos cinco minutos, el cuadro malagueño falló tres tiros, cometió cinco faltas y recibió un parcial de 11-0.

Visto para sentencia, para satisfacción de un Messina cariacontecido por el déficit en el rebote y el exceso de pérdidas de balón (21). Pero el entrenador italiano está encantado de haber recuperado a Llull y regocijado por la incorporación de Jaric. La apuesta por el jugador serbio de los Grizzlies era arriesgada por lo poco que había jugado las últimas temporadas. Pero cada día que pasa se consolida como una garantía de notable producción en la cancha, un comodín, un valor seguro. Todo lo contrario que Tomic, el último en llegar al Madrid, aún inadaptado, verde. Habrá que darle tiempo.

La garantía en el Barça es el propio Barça. Cuando engrasa la máquina, es temible. Navarro la puso en marcha con dos triples tan pronto como se produjo el salto inicial. Y de ahí, a un repaso en toda la línea al Gran Canaria (105-55), uno de los dos únicos equipos que han logrado derrotarlo en lo que va de temporada.

Por debajo de su rendimiento habitual Ricky Rubio y sin Morris, el Barça dignificó su casi siempre notable trabajo defensivo con un despliegue ofensivo apabullante. Con 16 triples, 24 puntos de Navarro y seis jugadores por encima de los diez puntos, logró su triunfo más amplio en el Palau y el segundo más amplio en la Liga. El récord, de 55, data del 12 de abril de 1986, cuando arrasó al Breogán por 82-137. Navarro, además, superó con 423 el número de partidos disputados por Epi en la ACB, una plusmarca relativa porque no se tienen en cuenta los partidos que el legendario jugador azulgrana disputó desde que ascendió al primer equipo en 1979 hasta 1983, cuando se disputó la primera Liga ACB.

El Valencia perdió ante un Valladolid (87-76) que suma cinco triunfos consecutivos. El DKV Joventut firmó su tercera derrota seguida ante el Estudiantes (83-68). El Caja Laboral Baskonia continúa sólido en la segunda plaza tras deshacerse del Alicante (90-75) con Ribas y Splitter en vena de aciertos.