Sarah Jessica Parker se suma a la mítica Halston
La actriz, fichada como diseñadora de la firma neoyorquina

Dos iconos de la moda neoyorquina han unido sus fuerzas. Quizá era sólo cuestión de tiempo. Roy Halston (1932-1990) vistió al Nueva York de los setenta -desde Jackie Onassis hasta Liza Minelli- y marcó el look de la mítica sala de fiestas Studio 54. Ella, interpretando a Carrie Bradshaw en la popular serie de televisión Sexo en Nueva York, se convirtió en uno de los iconos fashionistas e imitados más célebres de la última década. Ahora, Sarah Jessica Parker ha entrado a formar parte de Halston, según anunció ayer la revista Women's Wear Daily.
No es esta la primera vez que Sarah Jessica une su nombre al de una marca de moda. Sus diseños Bitten fueron comercializados por Steve & Barry hasta que la cadena entró en quiebra. Ahora la actriz retoma su carrera en la moda con Halston, donde será directora creativa de la línea prêt-à-porter Halston Collection -Marios Scwab seguirá al cargo de la línea de pasarela-. Además Parker tendrá un sitio en la junta directiva de la empresa, entre cuyos accionistas se encuentran celebridades como el todopoderoso productor Harvey Weinstein o el zapatero Jimmy Choo.
La relación de Halston con Hollywood se remonta al principio de la carrera del diseñador, que murió de sida en los noventa después de haber perdido el control de su marca, de la que acabó siendo despedido. Su adicción a las drogas dio al traste con su carrera y le convirtió en una controvertida figura en el universo de la moda.
Roy abrió a principios de los cincuenta su primera tienda en Chicago y entre sus clientas se contaron Deborah Kerr y Gloria Swanson. Lanzó su marca en 1968 en Nueva York y en las siguientes décadas triunfó con sus vestidos y pantalones en punto y sus chaquetones y abrigos cuadrados. No sólo sus diseños sino también su visión comercial fueron profundamente revolucionarios.
"Fue un gran innovador. Un maestro", señaló la comisaria Patricia Mears en la presentación de la exposición American Beauty en el Fashion Insitute de Nueva York. La muestra le rinde un merecido homenaje y vuelve a situarle como uno de los grandes reyes del diseño estadounidense. Está por ver si Sarah Jessica Parker podrá convertirse en la digna heredera del mito.

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