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Condena a la Generalitat por el crimen de un preso de permiso

El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha condenado a la Generalitat a indemnizar con 350.000 euros a la familia del dueño de un bar de Valencia asesinado por un preso de Quatre Camins, atracador reincidente, durante un permiso. El Departamento de Justicia denegó la indemnización, pero la familia recurrió y ahora el TSJC le da la razón al considerar que el permiso fue "objetivamente inadecuado".

El crimen se produjo en la puerta del local, la madrugada del 9 de septiembre de 2000. En aquella época, Antonio I. P. se encontraba cumpliendo una condena de 36 años de prisión por un delito de lesiones, ocho de robo con violencia y otro de robo con violencia frustrado. Salió de la cárcel para disfrutar de un permiso ordinario de seis días, pero no regresó. Según la sentencia, eso creó una situación de riesgo.

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