La realidad cotidiana de Wilhem Sasnal

Wilhem Sasnal está considerado como una de las estrellas del arte europeo de comienzos del siglo XXI. Nacido en Polonia (Tarnow, 1972) e hijo de la generación que alcanzó la mayoría de edad cuando en 1989 cayó el muro de Berlín, Sasnal da una visión personal de lo cotidiano a través de una veintena de pinturas y una película rodada en súper 8 que se exponen hasta el 24 de enero en el Centro de Arte Contemporáneo de Málaga (CAC), en su primera exposición individual en España.

Su obra, tanto pictórica como cinematográfica, es un juego libre y variado de estilos, técnicas y modos de representación. Trabaja una gran diversidad de medios, desde el dibujo y el cómic hasta el cine, la fotografía y la pintura. Una obra que va de la abstracción a la figuración con la vida cotidiana y su relación con el mundo como tema central.

Calificado como un "cronista" de la era contemporánea, Sasnal se define como un "pintor realista" ya que todo lo que crea tiene su origen en experiencias personales, en los medios de comunicación, en imágenes extraídas de libros o Internet, en la música... en definitiva, en situaciones sacadas de su propia vida, huyendo de situaciones ficticias.

El director del CAC Málaga, Fernando Francés, definió a Sasnal como "una de las cinco figuras más importantes del mundo menores de 40 años, algo en lo que coinciden galeristas y críticos especializados".

Según Francés, Sasnal ha sabido renovar la tradición de la pintura "desde un punto de vista ecléctico y sus obras reflejan desde la cotidianidad, lo que puede ver desde la ventana de su casa, hasta lo que él siente y piensa".

La intuición y la franqueza juegan un papel importante en su modo de representar; sus pinturas son una especie de "repetición" televisiva como por ejemplo Untitled (Athlets); Ohne title (Burning cartoons) o A club, expuestas todas ellas en el CAC Málaga.