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Vizcaya anula el proyecto de Barrika sin aclarar el futuro de los 14 chalés

El PNV se resiste a dejar fuera de ordenación las viviendas construidas

Diez años después y después de tres sentencias judiciales contrarias, la Diputación de Vizcaya anula la recalificación que ha posibilitado construir 14 chalets en Barrika, a pocos metros de la costa. Pero la institución foral no aclaró ayer qué pasará con estas viviendas en la zona de Barrikabaso, el primer caso de una urbanización en Euskadi con el riesgo de ser derribada, como ha ocurrido en Cantabria.

La diputada vizcaína de Urbanismo, Pilar Ardanza, reveló ayer, en las Juntas Generales, que el pasado 3 de noviembre firmó una orden que anula los acuerdos adoptados por la Diputación en 1999, 2000 y 2001, que dieron luz verde a cambiar una zona de suelo no urbanizable de especial protección paisajística y convertirla en urbanizable para construir 97 viviendas. Con ello, consideró cumplida la sentencia del Tribunal Supremo, que, en julio, anuló la recalificación aprobada por "arbitraria" y por el alto interés paisajístico de la zona.

La Diputación se remite al nuevo plan urbanístico que se prepara

Ardanza se esforzó en explicar que la Diputación ha tenido "un escrupuloso respeto a las normativas vigentes", pese a los reiterados informes de la viceconsejería de Medio Ambiente, contrarios a la recalificación y que los tribunales han confirmado la ilegalidad cometida. Sobre el futuro de la zona, no fue muy explícita y se remitió al acuerdo adoptado la víspera, en un pleno extraordinario, en el que el Ayuntamiento de Barrika (sólo con los votos del PNV) aprobó una propuesta para retirar la recalificación y preservar esta área. Ante las preguntas de la oposición sobre si hay alguna posibilidad de que se edifique en Barrikabaso, aseguró: "Nadie tiene ninguna intención". Y volvió a remitirse a que el consistorio de Barrika ha iniciado la elaboración de un nuevo planeamiento urbanístico. "Se pone el procedimiento a cero", afirmó.

El Ayuntamiento vizcaíno sí ha dado un giro en sus planteamientos. En julio, pocos días después de conocerse la sentencia del Supremo, en vez de acatarla, anunció el avance de su plan urbanístico en el que incluían 130 viviendas en Barrikabaso (cifra superior a las anuladas por el fallo judicial).

En estos meses, sin embargo, se ha conocido la amenaza de Txipio Bai -la asociación ecologista que llevó el caso a los tribunales- de que pedirá la demolición si no se asegura la regeneración de parte de la urbanización y se paraliza cualquier actuación urbanística en la zona. El PNV ya se ha reunido dos veces con los ecologistas para buscar una salida. Pero los peneuvistas tampoco ven clara la exigencia de Txipio Bai, que ha planteado dejar los 14 chalés fuera de ordenación como mal menor. Ayer, la diputada de Urbanismo no hizo ninguna mención al futuro de las viviendas pese a las insistentes preguntas de la oposición. "Empieza una nueva etapa. ¿Por qué no dejamos que haga su recorrido? Y si chirría podremos dar nuestra opinión".

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El problema principal es que si los chalés quedan fuera de ordenación, perderían su valor como inversión. Y, con una sentencia firme que declara el suelo no urbanizable, es complicado legalizar su situación urbanística.

La portavoz del PNV en la comisión de ayer, Nerea Ahedo, también insistió en que la "Diputación ha cumplido ya con la sentencia" y consideró que, tras el acuerdo del pleno de Barrika, es "un tema encauzado". No obstante, los peneuvistas han sido el único grupo juntero que no se ha sumado a una propuesta consensuada por el resto (PSE, PP, EB y el Mixto). El texto, que será debatido próximamente en la Cámara vizcaína, insta a que se incorpore como área protegida en el plan urbanístico del Bilbao metropolitano y que se amplíe la zona de protección costera a 200 metros.

Esta propuesta se redactó después de que hace una semana EB retirase otro texto sobre Barrika tras una petición del PNV de buscar un consenso. El nuevo documento se trasladó al grupo peneuvista en las Juntas, que, en principio, dio su visto bueno pero luego lo desechó tras consultarlo con el partido.

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