La Muestra de Teatro acaba con menos público
El espectador alicantino recela de las obras vanguardistas
El problema no es tanto la crisis económica, como la falta de sintonía entre el público alicantino y las nuevas tendencias teatrales. La XVII Muestra de Teatro Español de Autores Contemporáneos es un oasis en medio del desierto. En diez días se ofrecen 27 espectáculos de tendencias muy dispares (teatro de sala, café teatro, teatro de autor, monólogos, de calle, infantil...), y en una ciudad en la que durante el resto del año se programa, casi siempre, un teatro tradicional, mediático y familiar, esa maratón de dramaturgia viva es muy difícil de asimilar y digerir.
La Muestra se cerró ayer con un "ligerísimo" descenso en el número de espectadores, que el año pasado rondó los 6.000. "Apenas es perceptible esa bajada", avanza su director, Guillermo Heras. "Alicante lo que necesita más es un espacio escénico de referencia para las nuevas tendencias", agrega. El director reconoce, no obstante, que la dramaturgia contemporánea tiene "un mercado difícil". Y peor todavía si la oferta se limita a unos pocos días al año, y en una ciudad con hábitos y gustos teatrales diferentes.
"Alicante necesita un espacio de referencia para las nuevas tendencias"
Pese a todo, y pensando en el futuro, la dirección de la Muestra pretende conquistar al público joven con nuevas tendencias. "Una sociedad teatralmente sana es la que puede elegir", recuerda Heras. La presente edición ha sido de "transición" preparándose para las consecuencias de la crisis en la programación del próximo año: "Mi obligación será quejarme a las administraciones, pero no llorar. Pensaremos cómo podemos buscar más espectadores y ajustarnos al presupuesto". Y para ello considera interesante sondear espacios poco convencionales, y abrir la Muestra hacia las fronteras del teatro, con espectáculos de danza-teatro.
Los mendigos del espectáculo Business Class, de Antón Valen, tomaron ayer al mediodía la Explana de Alicante, y por la noche la programación de la Muestra se cerró con Siempre fiesta. En esta edición han destacado, entre otras, las obras Cabaret Líquido, Los mares habitados o Duques de Bergara Unplugged.
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