Detenidos cuatro 'ñetas' por el crimen de un joven de 18 años en Sants

Freddy Medina, estudiante de informática en el instituto La Guineueta y forofo del Barça, iba para mosso d'Esquadra. A los 18 años, el chico, nacido en Perú y con pasaporte español, pretendía seguir los pasos de su padre policía. Pero un desgraciado encuentro con un grupo de jóvenes le impidió seguir su formación. La noche del pasado 6 de mayo, Freddy fue apuñalado hasta la muerte en Sants. Ayer, los Mossos d'Esquadra informaron de la detención de cuatro jóvenes que participaron en aquella agresión. Todos ellos son, presuntamente, miembros de la banda latina Ñetas.

Los detenidos son cuatro suramericanos, incluido un menor de edad. Por ahora se desconoce su grado de implicación en el crimen. Tampoco se sabe si entre ellos está el autor material de las puñaladas en el abdomen que mató a Freddy. Lo que sí está claro es que dos de ellos están en prisión por unos altercados que protagonizaron semanas después del homicidio, según fuentes del caso. Renny Joslor S. M., venezolano de 23 años, Jean Hiroito E. O., Anthony T. S. (ambos peruanos de 19 años) y el menor de edad, no identificado, están acusados de homicidio.

Freddy y cinco amigos más acababan de ver, en un bar, el triunfo del Barça ante el Chelsea en las semifinales de la pasada Liga de Campeones. Cuando se encontraban en la confluencia de las calles de Galileu y Rosés, fueron abordados de forma violenta por un grupo de 10 personas. Los agresores lanzaron piedras, botellas y vallas de la construcción contra sus víctimas. En un momento de la refriega, Freddy se vio sin salida y fue apaleado y apuñalado.

Por ahora se desconoce el móvil del crimen, ya que la investigación sigue abierta. Fuentes del caso explicaron que los ñetas pudieron confundir a Freddy con un miembro de la banda rival por excelencia, los Latin Kings. También se sospecha que entre los cinco amigos del joven asesinado había un latin king. Eso explicaría por qué, según relataron algunas de las decenas de testigos del suceso -la victoria azulgrana había sacado a mucha gente a la calle y a los balcones- los agresores gritaron "ahí están, vamos a por ellos" cuando observaron a Freddy y su grupo.

Según esa hipótesis, Freddy pudo verse envuelto en una disputa que le era ajena, ya que no pertenecía a ninguna banda callejera, confirmaron ayer los Mossos d'Esquadra y personas de su familia y entorno. Precisamente por esa razón, la policía autonómica considera que el suceso no puede catalogarse como un ajuste de cuentas entre bandas latinas.

"Es una acción de violentos contra una persona ajena a todo esto", subrayó ayer el cónsul general de Perú en Barcelona, Ricardo Silva Santisteban. "Para los que optan por la violencia, el único final es la cárcel", dijo el presidente de Fedelatina, Javier García Bonomi, que lamentó la "pérdida de contacto" con los líderes ñetas en su frustrado camino hacia el abandono de la violencia.