Un ojeador bajo sospecha

La Real Sociedad anunció ayer que destituía a Eric Olhats, su ojeador en Francia, que ha sido condenado por el Tribunal Correccional de Dax (Las Landas) por un delito de corrupción de menores en una sentencia que todavía no es firme. Olhats se vio inmerso en este asunto por un sms enviado al teléfono móvil de un futbolista francés de 13 años al que representaba y que, según el tribunal, tenía un contenido inapropiado de carácter sexual.

La sentencia dictamina tres meses de prisión y 10 de alejamiento en el trabajo con menores e incluye una indemnización al jugador y a sus padres de 1.200 euros.

La defensa de Olhats argumenta que todo fue una broma, quizás de mal gusto, y que su defendido se limitó a reenviar un mensaje recibido en su móvil con motivo del cumpleaños del menor. Todo sería, en su opinión, un malentendido, pero, de momento, la Real ha decidido apartarle de su estructura en tanto se resuelve el asunto y trasladar de su domicilio a los futbolistas que vivían con él en Hendaya.

Olhats, que había trabajado en distintos clubes del sur de Francia e incluso en el área deportiva del Ayuntamiento de Baiona, había adquirido un mayor protagonismo al ser el descubridor de Griezmann, un joven jugador francés que se ha convertido en una de las referencias de la Real.

Griezmann vivía con Olhats, tras abandonar su Maçon natal, y ahora la Real ha decidido buscarle un nuevo alojamiento "más cerca de San Sebastián".

La confusión es absoluta para el jugador, que consideraba a Olhats casi como su segundo padre, y para la Real, que incluso había inscrito a Olhats en la secretaría técnica de la entidad.