Aguirre encara el curso con crisis política y económica

Un año crítico en lo económico y en lo político. Ésta es la situación de la región a la que se enfrenta la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, al inicio del curso político, que hoy comienza con el debate del estado de la región.

En lo económico los datos son mejores que los de la media nacional, pero el tropezón es considerable. El PIB madrileño cayó en el segundo trimestre del año un 2,9% interanual. El paro se ha duplicado en los dos últimos años, del 6% al 13,6%. Lo que deja un panorama desolador: 463.300 trabajadores apuntados al INEM. La economía de la Comunidad se basa fundamentalmente en el sector servicios. Y la cosa no pinta bien: la cifra de negocios de este sector en Madrid hasta junio se desplomó un 17,5% respecto al año anterior. Una caída superior a la media española. El sector industrial también se está viendo perjudicado por la crisis económica. Ha retrocedido un 15,9% hasta julio.

Las consecuencias de este panorama se reflejan en la cascada de regulaciones de empleo. Hasta junio, cerca de 14.000 personas se han visto afectados por expedientes de regulación de empleo. En total, 253 empresas se acogieron a ellos, lo que supone cuatro veces más que el año anterior.

Conflictos internos

En lo político la situación no es más boyante. Ha sido el peor año para la presidenta, a la que se le acumulan los conflictos internos y externos. Vio mermado su prestigio en su batalla personal en el seno del PP frente a Mariano Rajoy. Ha tenido que enfrentarse a su eterno rival, Alberto Ruiz-Gallardón, en el partido y en Caja Madrid, donde la guerra ha entrado en nueva batalla esta misma semana. El alcalde ha anunciado un nuevo recurso a la reforma de los estatutos que impuso la presidenta.

Aguirre se sentará hoy en un hemiciclo con tres diputados imputados en el caso Gürtel que forman parte de su propio grupo y uno de ellos es un ex consejero. Y aún no se ha aclarado el caso del espionaje en el Gobierno regional, aunque ella se empeñe en echar balones fuera y acuse al Ejecutivo de Zapatero.