"En algunas cosas soy un fantasma"
Pregunta. Dirige en teatro El pisito. ¿Ha chupado mucha rueda de la película de Azcona y Marco Ferreri?
Respuesta. He chupado mucha rueda de Azcona y poca de Ferreri. Más de Berlanga.
P. Ya que el problema resulta muy actual, ¿no hubiera sido mejor llamarlo La solución habitacional?
R. Mejor dejarlo en su época, porque hoy una pareja que lleva 14 años de relaciones y ella sigue virgen es de ciencia-ficción. Virgen habrá alguna monja.
P. Con la que está cayendo, ¿se puede hacer humor con el pisito?
R. La crisis no admite humor. Es una de las pocas cosas que hay que tomarse muy, muy en serio.
P. No vendrá la gente al teatro a llorar.
R. No. Comparará aquello con lo de ahora, y verá que todavía estamos peor; que es mucho mejor casarse con Asunción Balaguer [coprotagonista] que con Botín.
P. ¿Se quedó usted así después de pasar por los maristas?
R. Fíjese [carcajada]: espabilé, me hicieron perder toda la fe. Me enseñaron la vida del venerable fundador, que pasó a beato gracias a nuestros cánticos.
: "Pueblen los aires triunfales voces / den los pensiles tributo en flor /...".
P. Pues sí que le apañaron, sí.
R. Mi psiquiatra estará de acuerdo con usted.
P. Dicen que, por ley, lo que más ha subido Zapatero son las ayudas al cine. ¿Ha notado algo?
R. Al revés. Yo tenía dos guiones que me decían que eran caros. Uno, regalo de Arturo Pérez-Reverte y otro, de la actual ministra, Ángeles González-Sinde. Como eran caros, no podían ser. Ahora he hecho uno barato y no interesa, porque hay que ayudar a las películas de producción elevada. A este paso, voy a seguir haciendo teatro.
P. ¿Mola tener una ministra cineasta?
R. No sé lo que opinará un escritor o uno que lleve museos, pero siendo cineasta, claro que mola.
P. Igual le subvenciona ese guión del que es autora.
R. No creo, porque es sensata y lista.
P. ¿Usted es de la ceja o de algún otro lugar del cuerpo?
R. De algún otro lugar del cuerpo más a la izquierda de la ceja. Si funcionara mejor Izquierda Unida sería estupendo.
P. Una vez dijo que Sharon Stone era parecidísima a Assumpta Serna. ¿Ha ido ya al oculista?
R. Pues, efectivamente [ríe]. Antes no llevaba estas gafas.
P. Hablando de Sharon. ¿Usted qué tal descruza las piernas?
R. Me defiendo. Lo único que tengo virgen es el libro de reclamaciones.
P. ¿Cuál es el actor o la actriz más especialita con que ha topado?
R. Posiblemente, Assumpta.
P. ¿En qué se nota que es de Bilbao?
R. Yo sé que soy de Bilbao y que ejerzo. Y que en cuanto puedo me voy allí, me zambullo en el Casco Viejo, mis vinitos por la mañana, mis vinitos por la tarde...
P. Creo que se le nota en comparaciones como ésta: "Voy más de artesano que de autor, como les pasaba a Hitchcock a John Ford y a Minelli".
R. Sencillo como el viento, ¿verdad? [risas].
P. ¿No es un poco fantasma?
R. Sí, claro. En algunas cosas soy un fantasma, puedo serlo. Normalmente estoy contento conmigo mismo, que es bastante difícil, y, sobre todo, con el trabajo que he venido realizando.
P. Hizo un documental sobre el Athletic. "Liturgia religiosa", según usted. A tenor de los resultados del club, ¿no sería vudú?
R. Pues sí. Pero es que salía un cura, y decía que el levantamiento de la copa es como la consagración. Decía unas cosas que parecían de Buñuel más que de un cura.
P. ¿Se aplica a sí mismo el melodrama que tanto le gusta?
R. Yo soy más divertido y más cachondo que todo eso. Pero el melodrama me encanta. Siempre me ha gustado Douglas Sirk, y mis mejores películas son melodramas. Incluso la última, Tiempo de tormenta, quise hacerla como Lars von Trier, como el cine moderno.
P. Dice no arrepentirse de nada. ¿Siempre da en la diana?
R. No, no. Cuando acierto, acierto. Y cuando no, aprendo de los errores. No voy a comprarme un abridor de venas, que no me gusta. Ni aunque sea de Louis Vuitton y me lo regale Correa.
P. Siguiendo la actualidad, ¿tras El pisito qué hará, El paradito?
R. Hombre, si hubiera un guión de Azcona sobre eso, sí: El mileuristita.
P. ¿Hay virtudes que le adornen?
R. Ninguna, afortunadamente. No quiero tener. Qué pereza. Ya me dieron una medalla de virtudes los maristas.
P. Veo que los maristas le trabajaron a fondo.
R. Y tanto. Sobre todo uno de ellos. No a fondo, pero tuve que salir escapado.
Perfil
Tiene 71 años y trepa al escenario del teatro sin escalera. Confiesa que se cuida, aunque le va el comer bien, y no digamos el vino y el ron añejo. Le encanta dibujar, y ha hecho cómics y pintado al óleo. Colabora en un recital de Serrat en el que varios directores rodarán poemas del disco de Miguel Hernández. Le encanta el cine, aunque su primera pasión fue el teatro. Y le gustaría parecerse a Woody Allen.
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