El PP pierde la capital del turismo

El PP perderá el próximo día 22 la alcaldía de la capital del turismo valenciano. Benidorm, un icono y una ciudad referencial en toda España, pasará a ser dirigida por un equipo de gobierno que no tendrá el amparo de ninguna sigla partidista. Una moción de censura avalada por los concejales que resultaron elegidos en la candidatura del PSOE y un tránsfuga del PP hará posible el cambio. 105 millones de euros, el presupuesto municipal, dejarán de ser gestionados por los populares.

La presentación, ayer, de la moción de censura traerá notables consecuencias para la vida política benidormense. Los 12 ediles socialistas que firmaron la moción con un tránsfuga del PP para desbancar a los populares de la alcaldía han solicitado la baja formal de su partido. Se van antes de que los echen. De esta manera, evitan que la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, se vea en la tesitura de expedientar a su madre, Maite Iraola, firmante de la moción que se debatirá el próximo martes 22 de septiembre.

La historia se repite 18 años después, pero en sentido contrario, y con algunos matices. El PP llegó al gobierno municipal de Benidorm en 1991 mediante una moción de censura que aupó a Eduardo Zaplana a la alcaldía con el apoyo de una tránsfuga socialista, Maruja Sánchez. Ahora el PP, que ha ganado por mayoría absoluta todas las elecciones municipales desde entonces, perderá el poder por la alianza de 12 concejales socialistas con un edil tránsfuga del PP. "Pero aquí nadie ha comprado voluntades", insistió el futuro alcalde, Agustín Navarro, recordando que José Bañuls se fue primero del PP y del Gobierno, y tres meses después han llegado a un acuerdo que pone fin a la "ingobernabilidad".

Los ediles socialistas se reunieron a primera hora de la mañana de ayer en la sede del PSOE, luego fueron al Ayuntamiento para firmar la moción ante el secretario municipal, y a mediodía convocaron a los medios de comunicación en un hotel. El único en intervenir fue el futuro alcalde, Agustín Navarro, arropado por todos los ediles socialistas. "Teníamos que elegir entre la gobernabilidad en nuestra ciudad o el PSOE. La decisión ha sido un desgarro pero hemos tenido que dar la cara por nuestros ciudadanos", resumió Navarro quien criticó la "inacción" del alcalde del PP. Una "parálisis" de un alcalde dedicado "más a la política interna del PP que a velar por los intereses de su ciudad". Navarro renunciará a su acta de diputado provincial y será sustituido por Genoveva Tent, concejal en L'Alfàs del Pi.

El todavía alcalde, Manuel Pérez Fenoll, con el apoyo de Francisco Camps, quiso luchar por la dirección provincial del PP y perdió por cuatro votos contra el presidente de la Diputación, José Joaquín Ripoll. Precisamente, el tránsfuga del PP, José Bañuls, achacó a "las divergencias internas del PP" el motivo de esta moción. Bañuls, que no asumirá la concejalía de Urbanismo, rechazó la existencia de cualquier trama con supuestos intereses urbanísticos. El alcalde, Manuel Pérez Fenoll, no hizo ninguna declaración ni comparecencia pública. De ello se encargó el portavoz municipal del PP, Antoni Pérez, que tildó la moción como un "asalto a la alcaldía para romper la voluntad popular". Pérez no escatimó en calificativos: "Periplo infumable, fin de un sainete, crónica de un acto anunciado..." El edil intentó marcar diferencias con las mociones de censura en Dénia o La Vila Joiosa, donde el PP ha recuperado el poder apoyados en tránsfugas. "No es lo mismo, en La Vila mi partido fue el más votado, nunca se ha jaleado una moción de censura como aquí, y no hay ningún caso en el que el PP haya presentado moción de censura cuando se gobierna con mayoría absoluta".

Ayer los populares reaccionaron todos en tromba en la misma línea. El propio presidente nacional del PP, Mariano Rajoy, auguró que estos concejales volverán a presentarse en las próximas municipales en la lista socialista. "Ya verá como la mitad se presentan en las próximas", dijo Rajoy. Las sospechas del líder del PP eran compartidas ayer por numerosos observadores políticos, pero Antonio Hernando, secretario de Política Municipal de la dirección federal del PSOE, descartó que pudieran volver a presentarse. "El PSOE", dijo, "va a ser consecuente con el Pacto Antitransfuguismo en todo momento y en todo tiempo". Hernando le recordó a Rajoy que el PP ha vulnerado el pacto en 24 ocasiones desde 2007, sin que haya tomado medidas.

El secretario del PSPV, Jorge Alarte, aseguró no sentirse "desautorizado", informa Eva Batalla. "No puedo controlar las actuaciones ni de 26.000 ni de cinco millones de valencianos". Alarte se mostró extremadamente crítico con la posición de los concejales de Benidorm: "En este partido quien vulnera el Pacto Antitransfuguismo deja de ser militante del PSOE".

Mientras el PP valenciano se rasgaba las vestiduras, las ejecutivas socialistas federal y valenciana instaban a los ediles a "reconsiderar" la moción. Aunque en la Diputación de Alicante, los socialistas apuntan a Ripoll y al PP como los "únicos responsables" de la crisis, y en privado varios cargos socialistas estaban satisfechos. "Antes del verano debía haberse hecho", comentaban unos. Y mientras tanto, los empresarios de Benidorm, cansados de incertidumbres y polémicas, aplauden que por fin "se sale del paso" y se abra una nueva etapa.

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