El Gobierno planea subir los impuestos a las rentas altas

La crisis y el abultado déficit público obligan al Gobierno a poner en marcha un cambio de rumbo en su política fiscal. José Blanco, número dos del PSOE y ministro de Fomento, aseguró ayer que el Ejecutivo baraja una subida de impuestos a las rentas altas para garantizar políticas sociales e inversiones públicas ante los embates de la recesión sobre las arcas del Estado. "Si para ayudar a los que más lo necesitan los que tienen más recursos tienen que apretarse el cinturón, habrá que decirlo con claridad a la sociedad", dijo.

En las últimas semanas se ha barajado tanto una subida del IRPF como la eliminación de la deducción de 400 euros o del cheque-bebé de 2.500 euros. El Ejecutivo tiene previsto pasar revista a todas las figuras tributarias en los próximos Presupuestos, que empezarán a negociarse con la entrada del nuevo curso político. Pero esa revisión ya está en marcha: en 2011 entrará en vigor la supresión parcial de la deducción por vivienda, y en junio subieron los impuestos que gravan el consumo de tabaco y los carburantes.

Cristóbal Montoro, del PP, denunció que la subida afectará "a todos los consumidores y a las clases medias, a quienes ya afectó la subida de carburantes y tabaco".