La Junta vincula la situación del hotel Los Monteros a "intereses inmobiliarios"
El consejero andaluz de Empleo, Antonio Fernández, acusó ayer al propietario del hotel Los Monteros de Marbella (Málaga), Ernest Mályshev, de "dejar morir" este negocio emblemático de la Costa del Sol, una actitud que ha atribuido a "intereses inmobiliarios". El titular de Empleo no dudó en calificar de "sospechosa" la compra de este hotel, al esgrimir que desde que su actual propietario lo adquirió "no ha hecho ninguna" inversión y "está dejando morir" uno de los activos hoteleros más importantes de Marbella.
A instancias del consejero, la delegación provincial de Empleo de la Junta en Málaga interpuso a final de julio en los juzgados de Marbella una denuncia contra el propietario por un presunto delito de desobediencia grave contra la autoridad laboral. Para este tipo de delitos el Código Penal prevé una pena de entre seis meses y un año de cárcel, aunque Fernández explicó que la denuncia se basa también en la "inseguridad" laboral que está provocando a los 180 trabajadores del hotel. "La Administración está cansada ya de ponerle multas, sanciones y de darle oportunidades de negociar y, a la vista de que no cumplía y además mentía, hemos decidido denunciar".
En su opinión, la postura del propietario de Los Monteros responde a "intereses inmobiliarios o de otro tipo, pero no a los de un negocio turístico". Convencido de que la Justicia pondrá a este empresario ruso "en su sitio", Fernández expresó su preocupación por la situación de los trabajadores de este hotel cerrado, aunque ha indicado que están estudiando algunas vías para paliar su situación, entre ellas la suspensión de los contratos mientras dura la tramitación.
Después de ordenar la reapertura del hotel, la inspección de trabajo ha constatado que la luz no está en funcionamiento, se va a proceder al corte del agua y las instalaciones se están deteriorando. La representación legal del hotel ha presentado un plan de viabilidad que CC OO calificó como "inaceptable".
