Una idea del juez Flors
No solo no se despejó la incógnita, sino que ayer se sumó un elemento más a la investigación sobre la parte valenciana de la trama del caso Gürtel. La expectación sobre la segunda jornada de reunión de la sala de Lo Civil y Penal -la primera fue el martes- era máxima en círculos políticos. Especialmente atento estaba el PP, desde cuyo entorno apuntaban algunas voces a que la decisión estaba tomada y que el archivo era inminente. El hecho es que la Sala avisó ayer a los procuradores de que hoy viernes tendrían disponible la resolución. Pero el calendario se vio alterado.
El auto del Tribunal Superior de Madrid (TSJM) introduce nuevos elementos. La resolución es la respuesta a un escrito presentado por la Fiscalía Anticorrupción el pasado lunes. El ministerio público se dirigió al tribunal haciendo caso a José Flors, el instructor de la causa en Valencia. El magistrado desestimó la petición de que declararan Francisco Correa, Álvaro Pérez y Pablo Crespo, miembros de la trama de empresas corruptas vinculada al PP, ya que la Sala, en su día, fijó la investigación en los imputados Francisco Camps, Ricardo Costa, Víctor Campos y Rafael Betoret por un supuesto delito de cohecho. Pero en su respuesta señaló que, para poder ampliar las imputaciones, la fiscalía debía dirigirse al tribunal de Madrid que investiga una causa más amplia en la que se incluye el regalo de trajes y otros elementos de vestuario por parte de la trama a los cuatro. Y la fiscalía hizo caso. El resultado ha sido la decisión del juez Antonio Pedreira, del TSJ madrileño.
El auto de Madrid es un respaldo a Flors, que siempre se ha negado a incorporar nuevos testigos o imputados amparándose en las limitaciones establecidas por la Sala de lo Civil y Penal del TSJ valenciano. Pero además, supone que otro tribunal entiende que, en efecto, quienes hicieron los regalos deben ser juzgados en el mismo acto que quienes los recibieron. La sala de Valencia, hasta ahora, había entendido que no.
El tribunal de Valencia debe decidir ahora si acepta o no el material de pruebas que le envía el TSJ de Madrid. Si se negara, podría plantearse un conflicto que debería arbitrar y resolver el Tribunal Supremo. Si dice que sí, sencillamente incorporará tres nuevos imputados a la causa: Francisco Correa, Pablo Crespo y Álvaro Pérez. Eso ampliará las posibilidades de investigación del juez Flors.
Pero todo ese escenario se produce al límite del periodo hábil para las causas penales y coincide con la deliberación sobre los recursos de los imputados, o lo que es lo mismo, la decisión de tumbar la instrucción de Flors o permitir que siga el procedimiento por cohecho.
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