"Nos designen o no, vamos a ganar siempre"

La concejal Marisol Garmendia acaba de añadir a sus anteriores tareas la responsabilidad de impulsar la candidatura de San Sebastián como Ciudad Europea de la Cultura 2016. Desde hace dos meses, esta periodista que hace un lustro pasó el Rubicón para dedicarse a la política municipal, fichada por Odon Elorza, ha apretado el acelerador en esta misión, para la que va cosechando adhesiones y tendiendo puentes internos e internacionales.

Pregunta. ¿2016 está lejos o cerca?

Respuesta. 2016, en cualquier caso, está muy cerca. Porque se trata de un proceso ya iniciado que implica la transformación de la ciudad en las relaciones que tiene San Sebastián como capital de Guipúzcoa con la provincia y el resto de capitales del país. Hemos iniciado un proceso y, ganemos o no, nos va a servir: vamos a ganar siempre.

"Nuestros proyectos se orientarán a la movilización de la creatividad"

P. ¿Qué ha considerado imprescindible abordar al tomar el timón de la candidatura?

R. En agosto cumple un año la Oficina de la Candidatura, que comenzó con la filosofía de la participación ciudadana. En la idea central, el diseño de sus ejes y sus contenidos han intervenido activamente los donostiarras con más de 500 propuestas. Ahora empieza la nueva etapa de la definición de los proyectos culturales.

P. ¿Existe tanta participación?, porque el donostiarra es más bien pasivo.

R. Si hay una ciudadanía involucrada con su ciudad, ésa es la donostiarra. Pero, ¿qué es una ciudadanía activa?: ¿es activa la que corre el encierro y pasiva la que ve los fuegos artificiales? No lo creo. Tenemos un tejido social que es protagonista de nuestra candidatura, cuya idea central está expresada en el lema que la define, "Olas de energía ciudadana".

P. Están estableciendo redes de colaboración a través de donostiarras en el extranjero.

R. Vamos a crear una red de embajadores con los numerosos guipuzcoanos esparcidos por todos los rincones del mundo ejerciendo actividades, muchas de ellas relacionadas con la creación. Requerimos su adhesión, su colaboración y complicidad.

P. ¿Cuál es la imagen de San Sebastián que proyectan en el extranjero para su nominación?

R. La proyección internacional es una carencia, aunque, últimamente, trabajamos mucho en redes de ciudades que se esfuerzan en la sostenibilidad, la cultura y los valores de la paz. Tenemos que aprender, pero San Sebastián tiene también muchas cosas que enseñar a Europa: su esfuerzo por la movilidad sostenible, su lucha contra el cambio climático y su apuesta por una cultura entendida como instrumento de desarrollo personal y colectivo. Nuestra red de casas de cultura y su programación es un ejemplo en muchas ciudades europeas y españolas.

P. En los primeros debates sobre la candidatura se destacaba que el ciudadano donostiarra es más consumidor de cultura que creador y productor de la misma.

R. Debemos fomentar más los centros de creación artística. Hemos cubierto la etapa de la universalización de la cultura: la red de casas de cultura de base está creando un humus y haciendo, se supone, a la gente más culta. Ahora hay que pasar a otra etapa, la del fomento de la creación. Consumimos mucha cultura, tenemos unos festivales impresionantes, pero debemos establecer los mecanismos, las infraestructuras y las políticas de creación.

P. ¿Ya tienen una línea de trabajo con esos objetivos? ¿Está Tabakalera en el centro de ella?

R. Una política destinada a promover la creación es más que un centro, por mucho que éste sea Tabakalera que, desde luego, será catalizador de muchos creadores y muchas energías vinculadas al sector audiovisual y la cultura contemporánea. Pero los proyectos de la Candidatura 2016 estarán orientados a la movilización de la creatividad. ¿Cómo?, creando espacios, mecanismos, relaciones que permitan a la gente expresarse, reflexionar, crear, ser críticos... Algunos de los proyectos de la candidatura, que persiguen precisamente eso, van a ser más, que proyectos, procesos. Porque no se trata tanto de una fecha fija como 2016, sino de que hemos iniciado un proceso en el que vamos a ir trabajando para que culmine, alcancemos 2016 o no.

P. La crisis y la incertidumbre de futuro ¿cómo pueden afectar a esta candidatura?

R. El futuro siempre es incierto, pero para nosotros es una oportunidad. Creo que son muy buenos tiempos para la cultura y la creación. En tiempos convulsos, el ingenio, las ganas de superación para crear nuevos escenarios, aunque sean virtuales, y las esperanzas por las que luchar son el mejor acicate para la cultura. Nuestra candidatura apuesta por valores, no por fastos.

P. ¿El dinero no es problema?

R. Nosotros estaríamos preocupados si no tuviéramos ideas y no contáramos con la participación de a gente.

P. ¿Cree que no alcanzar la capitalidad no sería frustrante?

R. Vamos a ganar; aunque, si no alcanzáramos la nominación de Ciudad europea de la Cultura en 2016, no será un fracaso estrepitoso. Porque ganamos en cualquier caso. Ya sé que no da igual, pero lo importante es haber iniciado un proceso de transformación.