Via Stellae se cierra con un concierto de tributo a Haydn
El Festival Via Stellae finalizó el jueves en Santiago con un concierto de la Kammerorchester Bassel, dirigida por HK Gruber. El compositor, contrabajista y director austríaco dirige sin batuta y sus manos marcan tiempo y matiz como si cortaran el aire con la energía y precisión de un ducho karateka. Sus versiones de las sinfonías de Haydn, la nº 22 y la nº 101, tuvieron un hermoso sonido, destacando el color de cornos y trompas en el primer movimiento de la nº 22, así como el vuelo expresivo de los violines en el Andante de la 101.
Elena Mosuc hizo una versión irregular del Exsultate jubilate de Mozart. Algo falta de delicadeza en el Exsutate inicial, afinó estilo en el Tu virginum corona, para acabar con fuerza el Alleluia final. Mostró su vis dramática en dos arias de Don Giovanni y acabó regalando, ya sin Gruber en escena y acompañada por el quinteto de cuerda solista de la orquesta, una emotiva versión del Laschia ch'io pianga de la Almirena del Rinaldo de Haendel.
