Rojo pide que las diputadas de baja maternal puedan votar
Pretende terminar con una "discriminación de género"
En octubre del año pasado, el PSOE perdió una votación en el Parlamento andaluz porque varias diputadas estaban de baja por maternidad. Cinco meses después, la Cámara aprobó por unanimidad una reforma del reglamento que permite el voto delegado o telemático en esos casos. El Parlamento gallego también quiere poner punto final a lo que considera "una discriminación de género" que puede obligar a las mujeres a tener que "elegir entre su derecho político o la maternidad". La diputada Amparo González, número uno de la lista del PP por Ourense, escogió lo segundo en la pasada legislatura. Se ausentó en las votaciones durante su baja maternal, algo que en Galicia puede resultar decisivo porque la elección de un solo diputado basta para cambiar las tornas en una votación parlamentaria.
Las parlamentarias podrán delegar su dictamen en otro compañero de grupo
El mecanismo para terminar con esta "desigualdad entre hombres y mujeres", explicó ayer la presidenta de la Cámara, Pilar Rojo, es "articular un supuesto que trasciende el carácter indelegable del voto". Hoy mismo trasladará su propuesta a los grupos parlamentarios para que decidan el modo de encarar la reforma: como una proposición no de ley impulsada por unanimidad en el pleno o a través de una ponencia. Este último es el procedimiento que más convence al PSdeG. Como el resto de grupos, considera "un avance" la propuesta de Pilar Rojo y recuerda que no es la primera vez que el Parlamento gallego intenta modificar el reglamento con ese objetivo. En la pasada legislatura, los tres grupos acordaron un texto para poner fin a una "discriminación que afecta únicamente a las mujeres por el hecho de ser madres", una situación, puntualiza la secretaria de Organización del PSdeG, Mar Barcón, que es "fisiológica y no patológica". Los socialistas procurarán que la ponencia contemple la delegación del voto también durante el viaje para la adopción de niños.
Con esta reforma del reglamento de la Cámara, el Parlamento gallego se sube al tren de la igualdad que ya empezó a andar en Cataluña, Andalucía, País Vasco y la Comunidad Valenciana. El Gobierno central tiene todavía pendiente de responder una iniciativa pactada entre el PSOE y CiU -y aprobada por unanimidad en el Congreso a finales de 2008- que pedía un informe sobre las posibles reformas legales destinadas a que las diputadas de baja por maternidad o en período de gestación (en caso de embarazo de riesgo) pudieran votar.
La propuesta de la presidenta del Parlamento gallego es que las diputadas de baja por maternidad puedan delegar su voto en otro compañero del grupo. Las cámaras de la Comunidad Valenciana y Andalucía ofrecen además videoconferencias y otros sistemas técnicos para el ejercicio del voto en esos casos. Aunque la iniciativa de Rojo no contempla esta posibilidad, el portavoz del grupo parlamentario popular, Manuel Ruiz Rivas, explica que deberán ser los grupos los que "elijan la fórmula más adecuada, sin excluir a priori ninguna alternativa". La diputada del BNG Tereixa Paz aboga por la delegación del voto en otro parlamentario porque ve "ciertas dificultades jurídicas en las aplicaciones telemáticas".
El cambio en el reglamento afectará sólo a las bajas por maternidad porque el objetivo es permitir la igualdad entre hombres y mujeres y que la actividad parlamentaria sea compatible con la vida familiar. La delegación del voto en casos de enfermedad grave o de larga duración se abordará de manera separada en otras modificaciones.
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