Bárcenas tratará de convencer al juez de que él no puede ser "Luis el cabrón"

Luis Bárcenas, según cuentan los que le tratan mucho, es un optimista irredento. Mientras casi todos a su alrededor asumen que debería haber dimitido hace tiempo, que su implicación en el caso Gürtel es gravísima, y que el Tribunal Supremo pedirá el suplicatorio al Senado para imputarlo, él sigue absolutamente convencido de que será capaz de convencer al juez que le interrogará hoy. Se trata de Francisco Monterde, un conservador muy cercano al PP, elegido vocal del Consejo General del Poder Judicial en 1996 a propuesta de este partido.

En los últimos días, Bárcenas ha insistido en su entorno en que está seguro de que podrá salir airoso de su declaración, que ayer se encerró a preparar con su abogado, Miguel Bajo. El tesorero del PP se va a concentrar en varias estrategias escapistas. La principal de ellas, defender hasta el final que él no puede de ninguna manera ser "Luis el cabrón".

Los investigadores se basan en un apunte contable de 72.000 euros de la caja B de la trama del 5 de junio de 2007 -Ent.sobre P. Crespo y Álvaro Ref. Luis "el cabrón" en cuenta Álvaro- para investigarle por cohecho. Los demás apuntes -hasta 27- son de "LB" o "L", y alguno de "LBárcenas" en una supuesta trama en paraísos fiscales.

El tesorero ha asegurado a su entorno que es absolutamente imposible que él sea "Luis el cabrón" porque en 2007 Génova ya había roto con Correa, que sin embargo sí organizaba, contratada por Francisco Camps, los actos cuando Rajoy viajaba a Valencia, como sucedió en el mitin de la plaza de toros de las generales de 2008.

Bárcenas era la persona que más trataba con Correa, y fue el encargado de anunciarle que Génova rompía con él. Por eso, según varios testigos, entre ellos Isabel Jordán, ejecutiva de la red, entre los dirigentes de la red se decía que Bárcenas era "un cabrón".

Sin embargo, el tesorero lleva varios días contando a sus próximos que ya sabe quién es "Luis el cabrón". Se trata, según explica, de un constructor muy conocido, de nombre Luis, que tenía negocios con Correa y con el que después se peleó. Fuentes del PP se planteaban ayer la posibilidad de que, en función de cómo transcurra el interrogatorio del juez Monterde, Bárcenas pudiera sacar a relucir el nombre de este constructor como un candidato para "Luis el cabrón".

Bárcenas está absolutamente convencido de que tanto Correa como Pablo Crespo, su número dos, podrán corroborar que él no es "Luis el cabrón", a pesar de que tanto las declaraciones del contable de la red como las de Jordán apuntan hacia el tesorero del PP.

Respecto a los apuntes de 2003 -los que más preocupan a la defensa de Bárcenas, puesto que el resto, de 2002 y anteriores, estarían prescritos para un posible delito fiscal- Bárcenas tiene otras estrategias de defensa, según ha explicado internamente. También tiene una hipótesis sobre quién es "LB". De hecho, en la entrevista en Abc, la única que ha concedido, el tesorero la apunta: "se ha publicado alguna cosa en la prensa y otros medios". Se refería a una información de la Cadena Cope según la cual "LB" es Lucas Bagchus, consejero delegado de la sociedad de fondos de inversión Vistra. Sin embargo, ningún documento o informe oficial del sumario apunta en este sentido.

Aunque pudiera instalar en el juez la duda de que él no sea LB y Luis el cabrón, algo que afirman tanto el informe policial, como el de la fiscalía, como el de la Agencia Tributaria, como los testigos principales, tendría el problema de los apuntes de "LBárcenas".

Según su defensa, ahí el contable se refiere a pagos que él realizó de sus viajes personales, organizados por Correa, incluido un millonario safari en Suráfrica. ¿Por qué aparecería unas veces LBárcenas y otras LB? pregunta el tesorero como defensa. También en Abc dio pistas: "No soy ni L. ni L.B. Y cuando aparece Luis Bárcenas en esas anotaciones lo hace como pagador de las facturas de viajes que estoy abonando".El tesorero piensa además acudir con abundante documentación sobre sus ingresos e inversiones para justificar su aumento de patrimonio -se cuadruplicó desde 2002, según la declaración del impuesto de patrimonio que él mismo realizó- y también para explicar el ingreso de 330.000 euros en billetes de 500 que hizo en 2003. Es la misma documentación que él mostró tanto a Mariano Rajoy como a Dolores de Cospedal para que le creyeran cuando dice que es inocente.

Después de semanas de inacción, el PP ha puesto el acelerador para que se hable de las supuestas filtraciones y de los regalos, y no del fondo del asunto: los contratos que dirigentes del PP concedieron a la red de Correa. Por eso ayer Cospedal se reunió con los sindicatos policiales para hablar de las filtraciones, pero éstos le contestaron con un desaire: "Le hemos dicho que no queremos que la Policía esté en medio de una pelea política entre el PP y el Gobierno", sentenció el secretario general del SUP, José Manuel Sánchez Fornet.