Un 'holding' con las tres cajas vascas, una alternativa previa a la fusión
"Ahora Patxi López se lamentará de la ocasión perdida", admiten en el sector
Las primeras declaraciones de Mario Fernández tras ser investido por Xabier de Irala como su sucesor al frente de la BBK hicieron creer que el proyecto de la fusión no es "prioritario". Trasladado el debate al seno de las entidades afectadas, las respuestas se dividen en función de la experiencia de cada una de ellas. De un lado, en BBK y Kutxa "no toca volver a hablar de lo mismo", mientras en Caja Vital "es un proyecto que interesa a todos y más en estos momentos". Sin embargo, las tres partes coinciden en lamentarse de las dos oportunidades perdidas.
Pero el lamento adquiere condición de crítica fundada en sectores políticos y sindicales, que elevan el tiro hasta el propio lehendakari. "Ahora mismo Patxi López tiene que estar lamentándose de la ceguera que tuvieron el PSE y el PP de no apoyar la fusión por sus propios intereses electorales". Estas mismas fuentes consideran que "ante esta crisis, la existencia de una única caja vasca tan fuerte y solvente sería hoy en día toda una garantía no sólo para atender a las necesidades del propio Gobierno sino, incluso", agregan, "para acudir a cualquier operación que fuera interesante".
"PSE y PP tienen la culpa de que ahora nos veamos así; sólo vieron sus intereses"
"A algunos nos da algo de pereza volver a hablar otra vez de fusión"
Con todo, hay sectores en Euskadi que consideran "válida, perfectamente" la alternativa económica de la fusión de las tres cajas a corto y medio plazo, pero, aseguran, "no podría plantearse otra vez desde el punto de vista político porque ya se ha demostrado que es un error". Aprendida la lección, es cuando afloran posibles alternativas que irían configurando una acción concertada que "allane" el camino y aporte una fórmula "válida" para las tres entidades financieras. En este contexto se incluye la opción de crear un holding entre BBK, Kutxa y Caja Vital a modo de una alianza estratégica, donde no se descartara una concentración de activos que permitiría acometer con la consiguiente fortaleza algunas acciones mancomunadas en el sector que dimensionarían al alza a las tres cajas.
Para llegar a esbozar este punto de partida operativo es imprescindible, por obvio, rehabilitar el estado de confianza que permitió esbozar en su día el primer proyecto de fusión. "Las relaciones entre Irala y Rojo [presidente de Caja Vital] siguen siendo buenas", aunque, a partir de ahora hay una nueva situación y es como comenzar de cero", señalan en medios próximos a las dos cajas. En el caso de Kutxa, la llegada de Xabier Iturbe a su presidencia alteró el "círculo de amistad" anterior que se había fraguado con su antecesor, Carlos Etxepare, y de ahí que ahora se abra otra etapa "aunque da bastante pereza ponerse a hablar otra vez de fusión", admite una de las personas que lo ha vivido directamente.
Quizá sea más difícil una inmediata aproximación de posturas en el ámbito político, donde las heridas no están curadas, y mucho menos tras el cambio que ha deparado el 1-M. "Nunca será bastante para responsabilizar a PSE y PP de la culpa que tienen en que ahora nos veamos así porque sólo se preocuparon de sus intereses y no apoyaron una fusión que era buena para todos", reconoce con rabia un sindicalista. Para éste, una caja vasca "nos haría más fuertes ante la crisis, dispondríamos de más recursos, la expansión sería más factible y la racionalización estaría asegurada", añade.
Xabier de Irala ya no podrá quitarse la espina clavada que le supone el doble fracaso de la fusión. Nunca lo ha dicho de manera pública, pero el presidente de la BBK sigue atribuyendo una elevada culpa al comportamiento seguido por Patxi López, especialmente, y el PP, a cuyo líder, Antonio Basagoiti también explicó las razones económicas de la fusión así como a otros dirigentes políticos.
Precisamente a este profundo malestar con la actitud mostrada por el partido de López pudiera atribuirse la presencia de Irala en el colectivo Hemen, Ibarretxe, creado durante el periodo electoral del 1-M, y donde coincidió con Mario Fernández.
¿Será posible la fusión? Se antoja muy difícil arrancar un pronóstico entre las fuentes consultadas aunque, paradójicamente, entre quienes se opusieron en su día resulta más fácil encontrar ahora adhesiones. Un dirigente socialista recuerda que "el PNV se ha tenido que dar cuenta de que no podemos empezar esta casa por el tejado político" y por ello comparte la idea de un analista financiero de que "debería retomarse el documento que se hizo para la primera fusión, empezar a trabajarlo entre los técnicos y llevarlo al Parlamento cuando esté maduro de verdad".
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