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Álava deja una primera herida en el acuerdo PSE-PP, pese a su reafirmación

El Gobierno sostiene que lo mantendrá "con todas las consecuencias"

Álava ha abierto una primera crisis en el acuerdo de bases para el cambio y la estabilidad del Gobierno de Patxi López suscrito por el PSE-EE y el PP. Sin consecuencias para éste, en principio, porque ambos partidos y el propio Ejecutivo dejaron clara su intención de mantenerlo a salvo. Los populares, por boca de su presidente alavés, Alfonso Alonso, advirtieron de todos modos al lehendakari Patxi López de que la negativa de su partido a secundar la moción de censura en Álava coloca a su Gobierno "en el camino de una situación complicada y de debilidad".

"Este Gobierno tiene un acuerdo de bases sólido con el PP, que va a mantener con todas sus consecuencias", porque es el que da soporte a la "nueva etapa" dirigida a "cambiar políticas, actitudes y formas de hacer de las que el PNV ha sido responsable en los últimos diez años", fue la tajante afirmación de la portavoz del Gobierno, Idoia Mendia.

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El desenlace -provisional, según todos los indicios- sobre la moción de censura en Álava, sí deja abierta, sin embargo, una primera herida de confianza, como revela la insistencia del PP en que existe un incumplido "compromiso verbal", en palabras del presidente del PP alavés, Alfonso Alonso, y la del PSE en negarlo. "No existe ni ha existido ningún compromiso", recalcó, por su lado, el secretario general de los socialistas alaveses, Txarli Prieto. Éste apoyó su afirmación en una entrevista del presidente del PP, Antonio Basagoiti, publicada el 22 de junio, en la que éste decía por tres veces que el acuerdo con el PSE se reducía a lo que escrito en el documento firmado por los dirigentes de ambas formaciones y que no existía acuerdo ni negociación sobre la moción de censura en Álava, ni vinculación entre ésta y el apoyo del PP a los presupuestos del Gobierno.

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Pese a no considerar "baladí" esa fisura en la confianza, Alonso quiso ser conciliador y señaló que la adhesión de su partido al acuerdo básico con el PSE está fuera de duda. "Reiteramos nuestro compromiso con el cambio con más fuerza que nunca", afirmó. Eso sí, los socialistas, "tendrán que ganarse nuestra confianza". También Prieto, que optará a la reelección en el congreso provincial de octubre, mostró un tono conciliador y de reconocimiento hacia el PP. Formalmente, dejó todas las puertas abiertas para el futuro, no sin antes recordar que durante ocho años el PP gobernó Álava y Vitoria en solitario gracias al sostén de los socialistas. "No aceptamos la acusación del PP de que queremos arrinconarle. La historia y muchos datos darían fe de lo contrario, indicó. En el momento actual, "sabemos en qué terreno estamos, lo hemos elegido y lo valoramos", dijo Prieto, en referencia implícita al acuerdo que llevó al Gobierno al PSE. "Queremos un buen clima" para "explorar y ampliar las relaciones políticas con el PP, en el rumbo que hoy tiene la política vasca", añadió. También recordó al PP el "rédito" que ya ha obtenido de su papel de interlocutor preferente del Gobierno: la presidencia del Parlamento, que añade a la que ya tenía en las Juntas Generales de Álava, la del Tribunal del Cuentas, "una buena representación" en los órganos de control y gestión de EITB, y el crédito que le da haber pasado "del radicalismo y el desencuentro", que a su juicio practicaba antes de las elecciones de marzo, al terreno del "encuentro y la influencia".

En esta situación, la cuestión alavesa lleva así todos los visos de convertirse en un melón permanentemente abierto, por más que el presidente del PP, Alfonso Alonso dijera que su partido no hará de ella "un espectáculo en los próximos meses. O para adelante, o para atrás, pero las cosas claras", reclamó. El dirigente socialista alavés, sin embargo, no descartó la moción de censura en un futuro, sino que dijo que dependerá de dos cosas. Primero, del resultado global que surta el ofrecimiento del PNV de estabilidad presupuestaria e institucional en el Gobierno, diputaciones y ayuntamientos realizado por el PNV. Éste se verá en cuanto empiece en otoño el tanteo preliminar para la aprobación de las cuentas. Segundo, de que el PSE y el PP se pongan de acuerdo en las cuestiones programáticas y de proyectos para Álava y Vitoria.

De momento, Prieto alcanza en ese terreno "más coincidencias" con el PNV que con el PP; pero eso puede cambiar, sugirió. "Este gobierno foral no ha tenido nuestros votos ni tiene en nosotros una garantía ni un seguro de permanencia. Que nadie se engañe: del PNV nos separan muchas cosas, no estamos atados al PNV en Álava", advirtió. Si se crean las condiciones y coincidencias necesarias con el PP, "el cambio de gobierno estará hecho", concluyó.

El presidente del PP de Álava, Alfonso Alonso, flanqueado por los portavoces municipal y foral, Javier Maroto y Javier de Andrés.
El presidente del PP de Álava, Alfonso Alonso, flanqueado por los portavoces municipal y foral, Javier Maroto y Javier de Andrés.PRADIP J. PHANSE

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