Bilbao, fuera de juego

Si los planes anunciados en su día a bombo y plantillo se hubieran cumplido, Bilbao vería emerger el nuevo y vanguardista San Mamés; habría podido acoger una final del Manomanista 52 años después (la última se jugó en el Deportivo en 1957); y el Bilbao Basket habría abandonado el vetusto pabellón de La Casilla para instalarse en el coqueto Palacio de Deportes de Miribilla. Nada de eso ocurre hoy. San Mamés carece de diseño definitivo y de financiación; el mayor frontón de Euskadi lleva meses parado, y el Palacio de Deportes, tras un sinfín de peripecias, crece día a día pero acumula un retraso importante. Bilbao bordea el fuera de juego.

NUEVO SAN MAMÉS Casi todo por definir

San Mamés será más pequeño (53.000 asientos) y más barato (175 millones)

El Palacio estará acabado en marzo de 2010, con año y medio de retraso

Construido un 40%, el frontón es otro frente de la guerra Afer-Diputación

En marzo de 2007, los socios del Athletic aprobaron el proyecto de nuevo San Mamés, un estadio cinco estrellas a levantar sobre la antigua Feria de Muestras con capacidad para 55.000 espectadores. Costaría 183 millones de euros, se iniciaría en junio de 2008 y estaría acabado en el verano de 2012. La financiación correría a cargo de San Mames Barria, sociedad integrada por la Diputación de Vizcaya, la BBK (que comparte con el Athletic la propiedad de los terrenos del campo actual) y el Athletic: cada institución aportaría 61 millones. El Ayuntamiento y el Gobierno vasco fueron invitados a ingresar en la sociedad. Hoy, un año después de la fecha prevista para el inicio de las obras, un inmenso solar aguarda la llegada de las excavadoras.

El retraso se debe a diversos factores. Está la financiación. El proyecto fue presentado en época de bonanza, pero será ejecutado en plena tormenta, de ahí que San Mames Barria busque ahora cobijo en Lakua. Recientemente, el diputado general de Vizcaya, José Luis Bilbao, pidió al lehendakari Patxi López que el Ejecutivo aporte 55 millones de euros a una obra emblemática, que permitirá al País Vasco albergar finales de la Champions y partidos del Mundial de fútbol de 2018 al que opta España. Y está el proyecto. Los nubarrones económicos han achicado San Mamés. Si a los pocos meses de llegar a Ibaigane, en julio de 2007, Fernando García Macua anunció su intención de levantar un estadio mayor (58.000 asientos), la crisis ha forzado al club a redefinir el proyecto, suprimiendo 5.000 asientos y dejando el aforo en 53.000, tal y como adelantó EL PAÍS el pasado mes de abril. Esto permite que el costo estimado, que llegó a ser de 220 millones de euros, ronde hoy los 175 millones.

La pregunta es: ¿cuándo empezarán las obras? Macua aspira a colocar la primera piedra tras el verano, pero la cosa va lenta. El redimensionamiento del estadio obligó a redactar un nuevo proyecto básico, recién acabado por Idom. Pero aún falta definir los proyectos de ejecución y urbanización, licitar la obra (Macua se comprometió a convocar concurso público), adjudicarla. Tampoco se ha cerrado el convenio de utilización del estadio: quién lo explotará, cómo, cuándo, quién ingresará los beneficios...

Toda vez que las obras durarán no menos de cuatro años, y dado que difícilmente arrancarán en 2009, el Athletic no tendrá nuevo hogar antes de la campaña 2014-2015. Si todo va bien.

PALACIO DE DEPORTES Año y medio de retraso

El 2 de noviembre de 2006, el alcalde, Iñaki Azkuna, y el diputado general, José Luis Bilbao, presentan el proyecto de Palacio de Deportes: costará 35 millones, se levantará en Miribilla, sobre unas antiguas minas, tendrá un aforo de 8.500 espectadores y, adosado, se levantará un polideportivo de uso público. La obra estará acabada para finales de 2008. En marzo de 2007 se adjudicó la obra a la UTE integrada por Construcciones Sobrino, Morkaitz y Cycasa por 29,68 millones y 19 meses de plazo de ejecución. La primera piedra se coloca en septiembre, lo que aplaza su apertura al menos hasta abril de 2009.

En la finca asignada, hoy sólo asoma el esqueleto del graderío del Palacio (el polideportivo está más avanzado). El retraso es lógico si se tienen en cuenta los avatares vividos. En octubre de 2007 aparece lindane: toneladas de tierra contaminada son enviadas a Cartagena. Poco después, la empresa que diseñó el proyecto, Idom, descubre que resulta imposible asentar el edificio. Urge una nueva cimentación. Su coste, 12,4 millones de euros, hace que el proyecto se tambalee. La obra está a punto de ser cancelada, pero en noviembre de 2008 Diputación y Ayuntamiento, que la financian al 50%, deciden seguir adelante y asumir el nuevo presupuesto: 42 millones. Su finalización se anuncia entonces para finales de 2009. Superados aquellos sobresaltos, "la obra ha tomado ya velocidad de crucero", explica Agustín Sarria, gerente de Kirolgintzan, la empresa foral que gestiona los proyectos deportivos de Vizcaya. Sin embargo, reconoce que el Palacio, tras un otoño y un invierno especialmente lluviosos, no estará acabado este año, sino en marzo de 2010. "El Bilbao Basket puede estar tranquilo, jugará en Miribilla la temporada 2010-2011", garantiza el gerente de Kirolgintzan.

FRONTÓN-CASA DEL DEPORTE Cinco meses parado

El anunciado como mayor frontón de mano del País Vasco (tendrá 2.801 asientos, frente a los 2.095 del Ogueta vitoriano y los 1.944 del Atano donostiarra) debería llevar en marcha nueve meses. El 15 de marzo de 2007, Kirolgintzan adjudicó a Fonorte (Grupo Afer) la construcción de un edificio que en sus tres volúmenes, albergará, además del frontón corto, otro de trinquete y la sede de federaciones deportivas. Su coste, 18,98 millones; el plazo de ejecución, 18 meses. La obra debería ser entregada en septiembre de 2008.

Hoy, del frontón apenas se ha construido "un 40%", según Kirolgintzan y Afer, pero, más grave aún, la obra está parada. En enero, Fonorte anuncia a Kirolgintzan que la obra se ralentizará. "Los costes se disparaban, urgía una redefinición de la obra, pero no se llegó a ningún acuerdo", aseguran desde la constructora. "La empresa fue retirando personal. A mediados de febrero quedaban cuatro operarios, y los últimos meses, sólo dos", denuncia Sarria. "La obra no llegó a estar parada en ningún momento", aclaran desde Fonote. "Según la legislación, en efecto, no ha estado parada, pero sí a efectos prácticos. Con dos operarios y una escoba, ya me dirás", replica Sarria. Sea como fuere, la Diputación decidió rescindir el contrato de Afer. En el trasfondo de esta polémica decisión subyace el desencuentro que han protagonizado el diputado general, José Luis Bilbao, y Javyer Fernández, presidente del Grupo Afer, a cuenta de la fábrica de viviendas modulares de Alonsotegi. De hecho, el frontón es sólo una de las tres obras de Afer paralizadas por el ente foral. Así, el frontón se encuentra hoy en el juzgado. Kirolgintzan confía en que la justicia les dé la razón para volver a licitar y adjudicar lo que resta de obra, un trámite que no estará solventado antes de octubre de 2009.

¿Cuánto tiempo llevará rematar el edificio? "Hoy firmaría poder inaugurar el frontón antes de que acabe 2010", dice Sarria. Pero también cabe que el caso se enquiste en los tribunales y la obra permanezca parada hasta que no haya una sentencia firme. "Si nos dan la razón, exigiremos daños y perjuicios a Afer. Y si este parón daña la estructura del edificio, ejecutaremos parte o la totalidad del aval que depositó la constructora al recibir la adjudicación", advierte Sarria.