Pitos y agresiones en una protesta contra Barberá en El Cabanyal

Entre pitos, abucheos y empujones, los miembros de la plataforma Salvem El Cabanyal y la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, se volvieron a ver ayer las caras durante la inauguración de un aparcamiento en el barrio marinero. Mientras que Barberá denunció que tanto ella como sus acompañantes habían recibido "algunos golpes" de manifestantes durante la visita a las obras, la plataforma acusó a los escoltas de la alcaldesa de "agresiones" similares.

"Cuatro hombres con traje, acompañantes de Rita [Barberá], nos han rodeado y arrancado la pancarta. Tengo un arañazo y una contractura en el cuello", afirmó Ana, miembro de Salvem El Cabanyal y vecina del barrio, minutos después de denunciar en comisaria las supuestas agresiones. "Viene a pavonearse al barrio y no hace nada", añadió en relación con la escasa rehabilitación en la zona frente al plan del PP de derribar más de 400 casas para prolongar la avenida de Blasco Ibáñez, al que se opone desde hace una década Salvem El Cabanyal. Otra de las manifestantes aseguró haber recibido un puñetazo en un ojo por parte de un trabajador del mercado de El Cabanyal, cuyos empleados recibieron a Barberá con aplausos.

La alcaldesa, que acudió a la inauguración de un aparcamiento de 378 plazas en la calle de Martí Grajales, fue increpada por varias decenas de vecinos que, además de dedicarle una pitada, la abuchearon y gritaron "¡traidora!". Tras el acto, Barberá afirmó que los manifestantes eran de "esa izquierda radical sin convicciones democráticas que no saben sino de violencia". Según denunció, ella y parte de sus acompañantes habían recibido "varios golpes y algunos salivazos".

Para Vicente Gallart, vicepresidente de la asociación de vecinos de El Cabanyal, la visita de la alcaldesa fue una "provocación". "Horas antes de que llegara se han puesto a limpiar y parchear una de las calles más abandonadas", declaró. El acto se produjo, además, en medio de la polémica por una sentencia que exige al Ministerio de Cultura que dictamine si el plan del PP supone un expolio patrimonial. "A pesar de las actitudes antidemocráticas como la protesta de hoy, el Ayuntamiento seguirá trabajando en la mejora de El Cabanyal", replicó la alcaldesa.