_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Urgencias

Un médico dijo muy serio por la tele que la gripe de esa pobre chica, Dalila, se había enmascarado tras los síntomas del embarazo. ¡Qué jodida la gripe, ¿no?, utilizar el cuerpo de una cría encinta como caballo de Troya! Así no la diagnostica ni House. A House, en una situación de alerta mundial por el virus A, le llega una chica con fiebre, dolores en las articulaciones y dificultades para respirar, o sea, con todos los síntomas de una gripe de invierno en pleno verano, y lo primero que le pregunta es si está embarazada. Si está embarazada, le receta paracetamol y la manda a casa. Y si vuelve cuatro veces, como Dalila, cada vez con más fiebre, con más dolores, y con más dificultades para respirar, la manda cuatro veces a casa. Bastante suerte tuvo la chica con que no le dieran con los protocolos en la cabeza, en lugar de aplicárselos, por pesada.

Y si sólo fuera la gripe la que se enmascara... ¿Pero cómo adivinar, por ejemplo, que lo que llamó a la puerta como un ligero estancamiento económico era en realidad una crisis del copón? ¿Cómo distinguir un golpe de Estado de un regreso a la senda constitucional? ¿De qué van disfrazadas las rentas del capital para recibir mejor trato que las del trabajo?

Todo esto por no hablar del pederasta que se presenta en sociedad bajo la apariencia de un obispo o del ladrón que pronuncia discursos de patriota... Así están las cosas: el desparpajo se hace pasar por literatura, los intereses privados por intereses públicos, los pasillos de los hospitales por habitaciones con vistas, la gimnasia por la magnesia, Luzbel por Dios, los chorizos por senadores, las flores de plástico por flores naturales, la ambición de poder por la vocación de servicio, los ejércitos por ONGs, el chismorreo por periodismo... Dalila, coño, ¿a quién se le ocurre quedarse embarazada en tales circunstancias?

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_